¿Se está cumpliendo la paridad de género en el gobierno panameño? De los 16 ministerios que conforman el Gabinete del presidente Laurentino Cortizo, solo cinco están liderados por mujeres. Un hecho que envidencia el incumplimiento claro al V Pacto de Mujeres, Desarrollo e Igualdad 2019-2024 y que Cortizo firmó en marzo de 2019 en el Tribunal Electoral.
Si a los 16 ministerios le agregamos el cargo de los tres ministros consejeros, entonces serían seis mujeres versus 13 hombres. Sin embargo durante su campaña como candidato presidencial por el Partido Revolucionario Democrático (PRD), el hoy presidente señaló que respetaría la paridad de género en su gabinete y su gobierno.
Hecho que no cumplió ni cuando inició su mandato en julio de 2019, tampoco cuando sacó a dos mujeres de su gabinete en junio de este año. Actualmente Maruja Gorday, ministra de Educación, Doris Zapata, ministra Trabajo y Desarrollo Laboral, Janaina Tewaney, de Gobierno, María Inés Castillo de Desarrollo Social y más recientemente Erika Moynes, ministra de Relaciones Exteriores, son las cinco damas que junto a Eyra Ruíz, ministra consejera para Temas de Salud pública conforman junto a 13 caballeros, el gabinete del presidente Cortizo.
Para Elia López de Tulipano, Consejera del Consejo de la Concertación Nacional para el Desarrollo, la participación política de las mujeres está garantizada en la Constitución, las leyes y por varias convenciones internacionales que Panamá ha suscrito durante el tiempo.
No se trata por tanto indica López, de un asunto de “Jure”, más bien es un asunto de “facto”; y no es porque no haya mujeres activista políticas, pues al revisar la data partidaria en promedio el 50% de las personas inscritas en los partidos políticos son mujeres. Sin embargo, ellas tienden a estar sobrerrepresentadas en la base, en funciones de apoyo, y escasamente representadas en las posiciones de poder partidario.»
«Si damos una mirada a las cifras que dan cuenta del proceso electoral pasada de 2019, apenas un 10% de mujeres fueron postuladas como candidatas principales, los resultados en consecuencia son proporcionales a las postulaciones, 14 diputadas (16 hoy, dos suplentes de ocupan el cargo principal), 12 alcaldesas de 81 alcaldías y 70 mujeres representantes de corregimientos de un total de 679 que fueron sometidos a elección, una diferencia abismal con un gran déficit de participación y representación democrática.», resalta.
Esta situación de subrepresentación no es distinta en el ejecutivo, a pesar de las promesas de organizar gobiernos representativos, la realidad es otra, parece que le cuesta a quien encabece un gobierno identificar mujeres que le acompañen en la gestión, el principal argumento es que tiene que ser “capaz” y por supuesto que debe serlo, sin embargo, con ese mismo criterio no parece medirse la abundancia de hombres que nombran, más bien la percepción que dan es que se trata de un cupo político que debe ser llenado. Las mujeres en este país como en otros muchos, están capacitadas políticamente para asumir las responsabilidades, pero algunos no las ven, porque regularmente no están en los contubernios donde se definen estas designaciones.
«Hoy día, el gobierno nacional tiene un déficit de representación de mujeres en la toma de decisiones, eso es evidente, reconocemos, sin embargo, que es uno de los pocos en mantener al menos 5 mujeres como ministras en carteras menos tradicionales como son Trabajo, Relaciones Exteriores y Gobierno. La participación política de las mujeres no es un tema de favores, ni de cupos, es una condición para el desarrollo, la democracia y la paz.», puntualizó.