La Caja de Seguro Social (CSS), informó que inicio el proceso de resolución administrativa del contrato con la empresa española Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), a quien se le adjudicó la construcción de la Ciudad de la Salud, obra que tiene más de 10 años paralizada. “El objetivo es terminar la obra en base a lo que establecen las normas y leyes de la República”, preciso el director general de la entidad, Enrique Lau Cortés.

“Hemos instruido a nuestro equipo legal de iniciar el proceso de resolución administrativa de este contrato con todas la consecuencias que esto trae”, enfatizó Lau Cortés.

La entidad –detalló- va a cumplir con el proceso que establece la norma, de identificación de los incumplimientos en que haya incurrido el contratista, lo que se ha hecho, sin embargo dijo que se los reservaría porque forman parte de las estrategias desarrolladas para culminar felizmente con esta obra.

“Frente a esos desmanes y a esos incumplimientos no nos vamos a quedar indiferentes”, sentenció el funcionario.

Sobre un proyecto de ley presentado en la Asamblea Nacional, que establece el predominio de los intereses del Estado sobre los particulares, Lau Cortés dijo: “simpatizo con todas las iniciativas que busquen preservar los intereses de la patria sobre intereses individuales”.

“Tenga la plena seguridad que utilizaremos todos los recursos que nos de la ley para hacer que esta obra se ponga al servicio de los panameños”, añadió.

Lau Cortés dijo que en febrero culminaron conversaciones con FCC, las que no se concretaron porque el contratista nunca firmó el memorándum de entendimiento en donde se comprometía a cumplir los acuerdos logrados.

Luego de eso y tras los embates por el Covid-19 en el país, el pasado 4 de agosto, la CSS solicitó a FCC que cotizara las adecuaciones que se requerían para utilizar parte de las instalaciones para la atención de pacientes con Covid-19. Para ese requerimiento, la empresa responde que se requiere la elaboración de un nuevo contrato, lo que fue rechazado por la CSS tras advertir que el contrato vigente establece que se pueden solicitar modificaciones a la obra.

Tras el rechazo de esa petición, Lau Cortés indicó que el 25 de agosto “sorpresivamente” recibieron una notificación de FCC en la que se solicita resolver unilateralmente el contrato y con eso dar por terminado su compromiso con la CSS, aduciendo “causa de fuerza mayor”.

Sumado a eso, indicó que FCC interpuso una demanda ante la Cámara de Comercio Internacional de París, a través del que pretende evitar, mediante un procedimiento de emergencia, que la CSS pudiera en algún momento ejercer la fianza de cumplimiento que asciende a 55 millones de dólares.

“Le hemos contestado al contratista rechazando sus pretensiones de resolver ellos el contrato, porque de ser así el país quedaría desprotegido de cualquier reclamación”, precisó el director de la CSS.

Además se les envió una resolución del Ministerio de Salud en la que se le autoriza a la empresa FCC a reiniciar las obras de la Ciudad de la Salud y se le pide responder la solicitud realizada por la CSS de llevar a cabo las obras de emergencia de adecuaciones para la atención de pacientes con Covid-19, que modifican el contrato original.

Para enfrentar la demanda interpuesta ante el Tribunal Internacional de Arbritaje, Lau Cortés dijo que se ha contratado a expertos para la defensa del Estado panameño.

“La CSS hará todo lo que sea necesario dentro del marco de la ley para preservar los derechos y garantizar esos activos que le han costado tanto a este país y ponerlos al servicio de la patria”, precisó.

Lau Cortés enfatizó que “para nosotros es un compromiso fundamental terminar la obra y lo vamos a hacer en base a lo que establecen la leyes”.

La CSS ha planteado habilitar en esa obra, que tienen un avance entre el 65% y 69%, una sala con 84 camas para cuidados intensivos, 48 para cuidados respiratorios especial y 154 para pacientes de cuidados moderado y severos contagiados con el Covid-19.

La habilitación de ese espacio, debería hacerse en aproximadamente 30 días, una vez iniciados los trabajos de adecuación, destacó el funcionario.

Las autoridades de la CSS estiman que se requieren unos 215 millones para concluir esa obra que fue adjudicada por 554 millones en la administración del expresidente Ricardo Martinelli y se estima que terminará costando más de 800 millones al Estado panameño.