? Expertos en el tema señalan que en nuestro país la libertad de expresión es utilizada para propiciar insultos y degradaciones sociales.
? La otra cara: “Los gobiernos deben combatir el nuevo coronavirus alentando a las personas a usar mascarillas, no a callarse”, dijo en su momento Gerry Simpson, director asociado de crisis y conflictos de Human Rights Watch.
La Libertad de Expresión es un derecho, una lucha constante por tener la oportunidad de exponer tus pensamientos, que se considere tu opinión dentro del marco del respeto y la tolerancia. Hoy, con el impacto arrollador de las redes sociales y de la Pandemia por la Covid19, para algunos la esencia de la Libertad de expresión se ha deformado.
Human Right Watch, señaló en un informe que durante el primer trimestre de 2021, al menos 83 naciones en todo el mundo se han valido de la pandemia de COVID19 «para justificar violaciones al ejercicio de la libertad de expresión y de reunión pacífica. Los gobiernos han atacado, detenido, procesado y, en algunos casos, asesinado a críticos, dispersado protestas pacíficas, cerrado medios de comunicación y promulgado leyes imprecisas para criminalizar expresiones que, según sostienen, amenazan la salud pública»
“Los gobiernos deben combatir el nuevo coronavirus alentando a las personas a usar mascarillas, no a callarse”, dijo en su momento Gerry Simpson, director asociado de crisis y conflictos de Human Rights Watch.
La misma preocupación ha mostrado la Sociedad Interamericana de Prensa. En su reunión semianual, realizada de forma virtual, expusieron su preocupación por los principales conflictos que afectan la libertad de expresión y de prensa en la región, como la relación entre los medios y el poder político, la represión, la censura y las presiones contra el libre ejercicio del periodismo.
Unos días atrás, un abogado, durante un noticiero lanzó veladas amenazas contra un medio digital, que bien son entendidas, tal como lo expresó el Forum de Periodistas para las Libertades de Expresión e Información, como ataques directos al ejercicio del periodismo en Panamá. El abogado del expresidente Ricardo Martinelli, Ronier Ortiz hizo referencia a las asesinatos de periodistas en México, advirtió a los comunicadores nacionales «vamos a atacarlos».
Ante estos hechos recientes, se hace obligatorio preguntarse: ¿existe verdaderamete la libertad de expresión? ¿se ha convertido en libertinaje o peor aún, solo es utilizada a su conveniencia por quienes ostetan el poder?
Es evidente que se debe tener cuidado entre la peligrosa línea que separa la libertad de expresión, del libertinaje disfrazado de un derecho para hacer daño y propiciar insultos e irrespeto.
Gerardo Berroa expresidente del Fórum de Periodistas de Panamá (2019-2021) y director de Estrella de Panamá considera que en la actualidad más que libertad de expresión hay «libertinaje, hay muchas ofensas».
«En estos tiempos de redes, ha surgido una pléyade de personas que so pretexto de periodismo, publican informaciones cargadas de opinión, con un claro sesgo de lo que pretenden acentuar y una predisposición manifiesta de infligir un daño. Es el tipo de comunicación que se conoce como “sicariato de la información”. La división palpable que hay en la sociedad panameña y el odio que se respira en el ambiente, ha hecho aflorar este tipo de comunicadores sicarios que algunos aplauden y otros quieren “matar”, por sus ataques brutales», publicó ayer Berroa en el Editorial de La Estrella de Panamá.
En tanto, el sociólogo e investigador Enoch Adames señaló que frente a la libertad de expresión en Panamá, evidentemente esta sí se utiliza a conveniencia y en algunos casos hay excesos.
«Obviamente que la libertad de expresión puede usarse a conveniencia y puede degenerar en un libertinaje. Especialmente cuando se ejerce desde el anonimato. Pero frente a un libelo y además hay firma responsable, serán los tribunales los qué deben resolver. Esto se da, lamentablemente después que el daño está hecho», dijo.
Resaltó que por ello, es importante generar una cultura de valores y de responsabilidades individuales y colectivas. «Por supuesto, que esto se refiere a la manera en que históricamente la sociedad ha resuelto sus conflictos».
El sociólogo también indicó que pese a que es un valor individual, un derecho constitucionanal, la libertad de expresión, tiene sus límites y este límite lo establece la integridad moral o física de terceros.
«Hace poco un tribunal en Estados Unidos falló contra un ciudadano que promovió públicamente, que los electores mataran a sus senadores, configurando un precedente importante en la regulación a dicha libertad. Si bien es una experiencia en otro país, marca una posible tendencia», sostuvo.
El investigador manifestó que no obstante, las libertades individuales fueron, algunas, limitadas en tiempo de pandemia, esto se hizo con la finalidad de preservar los valores que corresponden a la colectividad.
«Con la libertad de expresión tenemos el mismo conflicto. Es el conflicto entre la libertad individual y la libertad colectiva, el asunto es quién decide. Y en democracia son los tribunales».
