Panamá y Costa Rica lograron un acuerdo binacional, que permitirá a transportistas panameños cargar y descargar sus mercancías en recintos fiscales costarricenses previamente designados por las autoridades de ese país, en un periodo de 72 horas.
Este pacto se dio luego de que el gobierno nacional y las autoridades de Costa Rica negociaran la implementación de un plan piloto para facilitar el comercio bilateral mientras dure la pandemia del COVID-19, tras las medidas adoptadas por ese país centroamericano de limitar el ingreso de transportistas de carga a su territorio, lo que generó la paralización de la actividad hace casi una semana.
Un comunicado del Ministerio de Comercio e Industrias de Panamá señala que este miércoles 20 de mayo, se estableció un acuerdo que contempla mejores condiciones en materia de salud y seguridad para los transportistas de carga panameños, y garantizar el abastecimiento de alimentos y medicamentos.
«El Gobierno Nacional está optimista con lo pactado, ya que facilitará el flujo de mercancía y el comercio regional, en un periodo tan sensitivo en materia sanitaria. De hecho, este acuerdo incluye el establecimiento de rutas controladas, trazabilidad y el uso de paradas autorizadas, así como un seguimiento estricto de los lineamientos de salud por parte de las autoridades del hermano país costarricense», detalló el ministro Ramón Martínez.
La ministra de Comercio Exterior de Costa Rica, Dyalá Jiménez Figueres, en una entrevista vía zoom a una televisora local explicó este jueves, que en la carretera sur de Costa Rica, norte de Panamá, se estableció una ruta controlada que va ir directamente desde la frontera hacia los almacenes fiscales seleccionados para que los transportistas descarguen o levante la mercancía.
En el protocolo sanitario también establece que habrán paradas específicas para que los conductores descansen o tomen sus alimentos y que la utilización de escoltas o dispositivos que permitan la trazabilidad del recorrido.
La funcionaria centroamericana, dijo que se dio un plazo de 72 horas en total para que los transportistas puedan realizar este trayecto, para la descarga y el levantamiento la mercancía para que puedan retornar a Panamá.
“Lo que se optó fue por esta ruta controlada donde se permite esta trazabilidad absoluta del trayecto del transportista, que llega a un recinto o almacén fiscal que tiene las condiciones fiscales para operar y luego regresa por la misma ruta identificada y trazada con paradas”, dijo Jiménez.
El documento acordado entre ambos países, también incluye un acuerdo para que transportistas de Sixaola, en Bocas del Toro, que se dirijan al Puerto de Moín, en Costa Rica, a descargar la mercancía con destino a otros países vía marítima, sean acompañados por una escolta.
Jiménez dijo que este es un acuerdo binacional entre Panamá y Costa Rica, pero que mantienen el diálogo para sumar tanto a Nicaragua, como a los otros países del triángulo Norte.
“Nos habría gustado que ayer se sumaran los demás países, porque eso hubiera permitido intentar de una vez, no solo descongestionar las largas colas que se han armado tanto en los territorios de Nicaragua y Panamá sino, probar nuevas formas -que esta nueva realidad nos impone- en que el comercio terrestre se va a tener que ir desarrollando”, apuntó.
Destacó que el Consejo de ministros de Comercio del Sistema de Integración Económica Centroamericana, aprobó en su última reunión elaborar un protocolo sanitario regional, el que se empezó a armar ayer en la primera reunión realizada para este fin. Este jueves debe comenzar a distribuirse entre los seis países centroamericanos para que emitan sus comentarios, dijo la funcionaria costarricense.
El pasado lunes, autoridades panameñas y centroamericanas participaron de una Reunión Extraordinaria del Consejo de Ministros de Integración Económica de Centroamérica, donde se determinó la conformación de comisiones interinstitucionales por país para presentar propuestas que ayuden a contrarrestar el efecto de la pandemia en el desarrollo comercial regional.