Todos los años, el distrito de Boquete, en Chiriquí, conmemora el 28 de noviembre con todo. Es la independencia de Panamá de España, pero Boquete la hizo suya. Este año, empero, la naturaleza se hizo sentir y Boquete sufrió el impacto de torrenciales lluvias. Pero el momento es propicio para que el gobierno voltee la mirada hacia este importante distrito que se ha hecho de un lugar en el mundo, al ser considerado un paraíso para jubilados y la tierra del mejor café. Ese auge ha hecho de Boquete que muchas personas se muden al lugar y con ello llegó la especulación, el desorden y el juega vivo. Boquete es tierra de flores, de café, de belleza y buena tierra. Lo más importante es que se fomente en ese distrito un desarrollo con orden. Este pedazo de Panamá, anclado en las faldas del volcán Barú, es un valioso tesoro que el país necesita preservar y hacerlo crecer porque nos deja muy en alto. El valor de su gente, el clima y su singular belleza, nos representa. Celebremos este 28 de noviembre con entusiasmo y pensando en todo el apoyo que se le pueda dar a Boquete tras este severo golpe de la naturaleza; porque Boquete es nuestro orgullo. ¡Así de simple!

Editorial escrito por el periodista Gerardo Berroa Loo