La empresa Cobre Panamá anunció en un comunicado la entrega al Ministerio de Comercio e Industrias de un plan inicial para dar inicio al proceso de desmantelamiento de la mina, el cual incluye una programación de «preservación y gestión segura» de sus componentes.
El plan presentado por Cobre Panamá está basado en los conocimiento singular del sitio. La empresa señaló que el mismo será actualizado continuamente a medida que evolucionen los requisitos de planificación y preparación.
En su comunicado, Cobre Panamá indica que este plan ha tomado en cuenta «la detención abrupta e inusual de las operaciones, antes del fin de la vida útil de la mina, lo que ha requerido incluir actividades y pasos adicionales para mantener la seguridad e integridad ambiental».
La propuesta de la empresa está compuesta por diez puntos de trabajo básico, contemplando gestiones, ambientales, sociales y de seguridad, además de aspectos financieros, actividades operativas que incluyen la preservación de equipos y edificaciones, mantenimiento y operación de la planta de energía y el puerto internacional de Puerto Rincón, entre otros.
Uno de los aspectos de este plan tiene que ver con el «concentrado de cobre», expuesto por la empresa como una situación «prioritaria», la concentración de cobre, calculada en más de 120 mil toneladas de cobre almacenado en el sitio. Si se registra un almacenamiento prolongado, sostiene la empresa, «puede aumentar la temperatura de la pila de concentración», generando riesgos de combustión, además de la posible liberación de «polvo de sulfuro de cobre y gases dañinos, como el sulfuro de hidrógeno».
El plan contempla la utilización de unos 1,400 trabajadores para ejecutar los puntos contemplados, estableciendo la reducción «inevitable» en esta cantidad, producto de los avances que se vayan haciendo en esta planificación.
En el aspecto económico, Cobre Panamá estima que esta programación tendrá un costo de «decenas de millones de dólares por mes», dinero que requiere de una fuente de financiamiento continuo, para garantizar el cumplimiento de objetivos y la sostenibilidad del plan.