El esperado encuentro entre los presidentes Gustavo Petro, de Colombia y Laurentino Cortizo, de Panamá, se dio finalmente este martes en Nueva York, Estados Unidos, en una reunión bilateral programada dentro de los eventos correspondientes a las septuagésimo octava Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Dos temas fueron los más relevantes entre los que abordaron ambos mandatarios; la situación migratoria que ingresa a Panamá a través de la selva del Darién desde el lado colombiano, fue el principal en la agenda.
Como un acuerdo preliminar, Petro y Cortizo van a abordar la migración irregular, como un tema prioritario de sus agendas, para lograr un flujo ordenado y seguro en la frontera entre Panamá y Colombia, a fin de salvaguardar la vida y la integridad de las personas que tratan de atravesar la espesa y peligrosa.
La cifra de migrantes irregulares que han ingresado en lo que va del año al país a través de la selva darienita supera los 360 mil individuos y se proyecta que para el término del 2023, el número de personas habrá superado los 400 mil migrantes irregulares.
Otro tema abordado por Petro y Cortizo fue el relacionado con la interconexión eléctrica entre Panamá y Colombia, el cual cuenta con cuatro estudios previos de diseño relacionados con el corredor ambiental, diseño básico de la línea, diseño estación HDVC y cable marino, iniciativa en ruta al proceso de integración energético latinoamericano, propiciando una futura integración eléctrica regional.
Se trata de un proyecto de una extensión aproximada de 500 kilómetros de línea eléctrica entre ambos países, con una capacidad de transporte de energía estimada en unos 400 megavatios.
De igual forma, los dos presidentes reiteraron su interés en la activación de la Comisión de Buena Vecindad entre Panamá y Colombia, con el objetivo de dotar a la cooperación fronteriza de las herramientas prácticas y operativas, buscando fortalecer la coordinación de acciones de interés común en las áreas de educación, salud, medio ambiente, turismo, circulación de personas y embarcaciones, entre otras, en las regiones fronterizas de ambos países.
Ambos mandatarios acordaron sostener una nueva reunión, sin especificar fechas, destacando estos temas como parte de una agenda de tratamiento prioritario, en aras de mantener una relación bilateral en los mejores términos.