Los restos mortales de la reina Isabel II de Inglaterra han partido este miércoles desde el Palacio de Buckingham, inicio de un cortejo fúnebre que concluirá en Westminster y que precede a la apertura de una capilla ardiente en la sede parlamentaria.
El nuevo rey, Carlos III, participa de nuevo a pie en este cortejo, tal como ya hizo en Edimburgo. En esta ocasión, además de sus hermanos, le acompañan a pie sus dos hijos, los príncipes Guillermo y Enrique, primero y quinto en la línea de sucesión al trono, respectivamente.
El féretro avanza sobre un carro de armas tirado por caballos, que recorrerá en aproximadamente 40 minutos la distancia que separa Buckingham del Palacio de Westminster. El arzobispo de Canterbury oficiará después una misa en memoria de la difunta monarca.
A las 17.00 hora local se abrirá la capilla ardiente para que los ciudadanos de a pie puedan darle el ultimo adiós a Isabel II. Miles de personas se agolpan ya en las calles de Londres y el Gobierno prevé colas de más de 30 horas.