El proyecto, según publicado en medios estadounidenses, se basaría en el lanzamiento de más de 1.000 NFT (Non Fungible Token, en español ficha no fungible) vinculados a la imagen de una cerámica pintada a mano por Picasso en octubre de 1958.
El negocio fue mencionado por Marina Picasso, nieta de Pablo, y su hijo Florian.
Esa información es «errónea», indicaron los herederos en un comunicado transmitido por su abogado Richard Malka a la AFP.
«La señora Marina Ruiz Picasso, el señor Florian Picasso, el administrador de la Sucesión Picasso -señor Claude Ruiz Picasso- así como la Picasso Administration quieren precisar que a fechar de hoy no existe ningún NFT ‘Picasso’ autorizado», indica el comunicado.
«El NFT del señor Florian Picasso -y de artistas con los que colabora- es una creación propia, independiente de cualquier reivindicación respecto a Pablo Picasso y sus obras».
En un sitio internet de Marina y Florian Picasso se anuncia la subasta de una obra, «Visage de Lumière», prevista para el 28 de enero, y durante una duración de 24 horas.
Otra obra, «Visage de Couleur», será lanzada al mercado en forma de 5 ediciones limitadas, de 200 ejemplares cada una, en ese mismo sitio internet (nft.manandthebeat.com/#).
Casi desconocidos hace un año, los NFT son unos certificados de «autenticidad» ligados a obras de criptoarte (que se pagan con criptomonedas) y que han provocado una gran especulación en el mercado.
Un artista digital estadounidense, Beeple, vendió en marzo del año pasado el NFT de una obra por 69,3 millones de dólares en Christie’s.
AFP