La organización Médicos Sin Fronteras (MSF) en Panamá se trasladó a la provincia de Darién, y junto al Ministerio de Salud (Minsa), están brindando atención médica, de salud mental y orientación social a la población de migrantes que ingresan a territorio panameño.
Integrantes de la organización y funcionarios del Minsa, atendieron a las personas que entran a Panamá específicamente por la comunidad de Bajo Chiquito, en la zona fronteriza con Colombia.
Owen Bremil, MSF en Panamá, señaló que debido a la gran cantidad de personas que llegan al Centro de Salud en Bajo Chiquito, se ha extendido el trabajo para que tanto migrantes cómo la población pueda atenderse.
«En el mes de julio hemos atendido 7,500 personas y en el mes de agosto se atendieron 8,000”, resaltó en representante de MSF
“Estamos trabajando mano a mano con un equipo del Ministerio de Salud, conformado por un doctor, un técnico y un enfermero», dijo el médico.
El Minsa le pide a la población no bajar la guardia, cumplir con medidas de bioseguridad y asistir a los centros de vacunación contra la COVID19.