El gabinete de seguridad israelí se reunió este jueves y aprobó un cese del fuego negociado por Egipto. Hamás y la Yihad Islámica confirmaron el inminente fin de las hostilidades, que se han cobrado casi 250 vidas en 11 días.
El alto de fuego debería empezar a partir de este viernes.
Las negociaciones diplomáticas empujaron al gobierno israelí a aprobar un alto el fuego con el movimiento islamista Hamás, en el poder en Gaza. El gabinete de seguridad israelí, que incluye al primer ministro Benjamin Netanyahu y a la élite de la seguridad del país, se reunió para decidir qué hacer a continuación.
«El gabinete aceptó por unanimidad la recomendación de todos los funcionarios de seguridad (…) de aceptar la iniciativa egipcia de un alto el fuego bilateral sin condiciones», indicaron funcionarios israelíes en un comunicado.
El anuncio se produce después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instara el miércoles al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a trabajar por una desescalada, en medio de los intentos de mediación de Egipto, Qatar y las Naciones Unidas.
Los ataques seguían siendo intensos este jueves en la Franja de Gaza, donde murieron cinco personas, lo que eleva a 232 el número de palestinos muertos en el enclave, según el recuento de Hamás. Por el lado israelí, 12 personas murieron por el disparo de cohetes.