Juan Carlos Delpino, miembro del Consejo Nacional Electoral, cuestiona la legitimidad de los resultados que dieron la victoria a Nicolás Maduro
En un giro inesperado que sacude el panorama político venezolano, Juan Carlos Delpino, rector principal del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, ha denunciado graves irregularidades en las elecciones presidenciales celebradas el 28 de julio de 2024. Sus declaraciones, realizadas casi un mes después de los comicios, ponen en tela de juicio la legitimidad del proceso electoral y la victoria proclamada del presidente Nicolás Maduro.
Delpino, uno de los cinco miembros del CNE y asociado a la oposición, manifestó en una entrevista con The New York Times y en un comunicado público que «no había recibido ninguna evidencia» de que Maduro realmente hubiera obtenido la mayoría de los votos. Esta afirmación representa la primera crítica importante desde dentro del sistema electoral venezolano y contradice directamente los anuncios oficiales del gobierno.
Irregularidades denunciadas
El rector electoral enumeró una serie de problemas que, según él, comprometieron la integridad del proceso electoral:
- Desalojo de testigos de la oposición durante el cierre de mesas electorales.
- Interrupción en la transmisión electrónica de resultados desde las máquinas de votación al centro de datos del consejo.
- Negativa del CNE a publicar los resultados máquina por máquina.
- Falta de reuniones del directorio del CNE en los meses previos a la votación, lo que llevó a decisiones unilaterales por parte del presidente del organismo.
Delpino también criticó la exclusión de partidos opositores con mayor porcentaje de votos en elecciones anteriores y las restricciones impuestas para el registro de votantes en el extranjero.
Cuestionamiento de resultados
Hasta la fecha, ni el CNE ni el gobierno de Maduro han publicado las actas que verificarían la victoria del presidente. En contraste, la oposición ha divulgado recibos de más de 25,000 máquinas de votación que, según afirman, demuestran una victoria abrumadora del candidato opositor Edmundo González, con el 67% de los votos.
«Me da vergüenza y pido perdón al pueblo venezolano, porque todo el plan que se tejió para tener unas elecciones aceptadas por todos no se logró», expresó Delpino en su comunicado.
Reacciones internacionales
La comunidad internacional ha expresado serias dudas sobre la legitimidad de las elecciones. Estados Unidos ha reconocido a González como el ganador, mientras que incluso gobiernos de izquierda como los de Colombia y Brasil han cuestionado la victoria de Maduro.
Dos paneles independientes de observación electoral, uno de las Naciones Unidas y otro del Centro Carter, han declarado que el proceso no cumplió con los estándares mínimos para una votación democrática.
Consecuencias y perspectivas
Las declaraciones de Delpino llegan en un momento de gran tensión política en Venezuela. El gobierno ha iniciado una persecución contra opositores, incluyendo al propio González, quien ha sido citado a declarar como parte de una investigación por presuntos delitos electorales.
El rector electoral, quien ahora se encuentra en la clandestinidad por temor a represalias, insiste en que la solución debe ser electoral y democrática. «Creo que incluso hoy la respuesta para Venezuela es la democracia», afirmó, aunque reconoció la necesidad de cambios en el liderazgo del CNE.
La crisis electoral en Venezuela parece estar lejos de resolverse. Con la comunidad internacional dividida y las tensiones internas en aumento, el país sudamericano se enfrenta a un futuro incierto. Las denuncias de Delpino podrían ser un punto de inflexión en la búsqueda de transparencia y legitimidad democrática, pero también podrían exacerbar el conflicto político en una nación ya profundamente polarizada.