La Organización de las Naciones Unidas (ONU) convocó a una Cumbre sobre la Ambición Climática que se celebrará el próximo 20 de septiembre en la sede de la ONU en Nueva York. El secretario general de la ONU, António Guterres, invitó a líderes mundiales, autoridades locales, empresarios y representantes de la sociedad civil con el objetivo de acelerar las acciones para hacer frente a la crisis climática.
Según afirma la ONU en los documentos presentados, la cumbre busca ser un hito para demostrar la voluntad global de avanzar a mayor velocidad en la transición hacia una economía baja en carbono, equitativa y resiliente al clima.
De acuerdo con el último reporte del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), los impactos del calentamiento global son enormes y las emisiones de gases de efecto invernadero se mantienen en niveles récord. Por ello, es imperativo reducir las emisiones drástica y rápidamente en las próximas tres décadas, a fin de limitar el incremento de la temperatura global a 1.5°C con respecto a niveles preindustriales y evitar las peores consecuencias.
La ONU subraya que las poblaciones menos responsables del cambio climático ya están sufriendo sus efectos y requieren apoyo inmediato para adaptarse y recuperarse de pérdidas y daños. Esto representa un asunto de justicia climática que demanda atención urgente por parte de gobiernos y organismos financieros internacionales.
La Cumbre sobre la Ambición Climática se desarrollará en torno a tres ejes: ambición, credibilidad e implementación.
En cuanto a ambición, se espera que los líderes gubernamentales presenten antes de 2030 sus contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC) actualizadas, compromisos fortalecidos con las cero emisiones netas, planes de transición energética sin expansión del consumo de combustibles fósiles, metas más ambiciosas en energías renovables y mayor apoyo al Fondo Verde para el Clima, entre otros puntos.
Sobre credibilidad, directivos de empresas, ciudades, regiones e instituciones financieras deberán exhibir planes de transición alineados con los estándares en la materia definidos por la ONU. Estos requieren establecer metas de descarbonización para 2025 y 2030, reducciones reales de emisiones y compromiso público con la acción climática basada en evidencia científica.
En cuanto a implementación, los diversos actores presentarán alianzas existentes o nuevas para acelerar la descarbonización en sectores altamente contaminantes y promover la justicia climática.
La Cumbre sobre la Ambición Climática se realizará en forma paralela a la 77° Asamblea General de la ONU, que inicia el martes 20 y reunirá en Nueva York a líderes de todo el mundo. Previo al encuentro, miles de personas marcharon el domingo en la ciudad para exigir el fin de los combustibles fósiles, portando consignas como “Biden, acaba con los combustibles fósiles” y “No podemos comer dinero”.
La activista Analilia Mejía manifestó que “estamos aquí para exigir a la administración que declare la emergencia climática” y recordó que “el horror es posible” tal como lo han demostrado recientes eventos climáticos extremos alrededor del mundo.
Por su parte, la joven activista Nalleli Cobo invitó a los líderes mundiales a “pasar 24 horas en su casa” ubicada cerca de un pozo de petróleo y gas en California, Estados Unidos. «Les garantizo que al final de esas 24 horas verán de manera diferente el petróleo», expresó.
La Cumbre sobre la Ambición Climática busca concretar compromisos y planes ambiciosos para enfrentar el cambio climático de manera urgente. El secretario general de la ONU advirtió: “La historia recordará su acción, o inacción”.
