La dirigente de la oposición peruana, Keiko Fujimori, ha reconocido este lunes a Pedro Castillo como presidente del país, casi un mes después de su toma formal de posesión y mes y medio después de la segunda vuelta de las elecciones en las que Castillo se impuso a la propia Fujimori por un estrecho margen de votos.
«Yo reconozco al señor Pedro Castillo como presidente de la República de nuestro país. Espero que él escuche el sentir de las grandes mayorías y que haga un buen mandato en los próximos cinco años», ha afirmado Fujimori en una entrevista con la emisora peruana RPP.
La excandidata presidencial ha abierto además la puerta a reunirse con Castillo en calidad de líder de la formación opositora Fuerza Popular, con una importante presencia en el Congreso, y siempre que el mandatario lo solicitara de manera formal.
«Yo no me niego a esa posibilidad. Cada vez que un presidente de la República me ha solicitado conversar, siempre he asistido. Es más, la semana pasada ha habido una reunión del Acuerdo Nacional y como representante de Fuerza Popular ha acudido el vocero Nano Guerra García», ha apuntado.
Fujimori ha explicado que reconoció la victoria de Castillo unas semanas después de la publicación de los primeros resultados oficiales «más allá de las denuncias e irregularidades que nosotros hemos revelado» y que dejó de participar en las manifestaciones convocadas para expresar rechazo a Castillo.
«He decidido no participar en estas movilizaciones, pero sí saludo el activismo político. Creo que es fundamental que nuestros ciudadanos estén alertas, sobre todo porque vemos que hay una intención de mantener su plan radical, pero todavía hay muchas alertas que nos preocupan que quieran convertir a nuestro país en Cuba y en Venezuela», ha argumentado.
Fujimori advirtió de fraude electoral en campaña y posteriormente agotó todos los recursos legales para exigir una repetición de la votación, sin que se hallaran pruebas de irregularidades relevantes.
Causas Judiciales
También se ha referido a los casos abiertos contra ella por corrupción por el conocido como Caso Odebrecht y ha subrayado que no teme volver a prisión. «No. Estoy tranquila, serena, tratando de recuperar el tiempo con mis hijas y sobre todo preocupada por lo que pueda pasar con nuestro país», ha respondido.
El proceso judicial estará en manos de sus abogados, mientras que ella se concentrará en el ámbito político, en las próximas elecciones locales y regionales, en las que se postula para «hacer un muro de contención frente al comunismo».
Al ser interrogada por si pediría un indulto para su padre, el expresidente Alberto Fujimori, condenado por crímenes contra la Humanidad, la dirigente opositora ha respondido que no ha tratado el tema con su familia ni con el propio Fujimori, aunque ha señalado que «como hija» desea verlo en libertad. Además, ha recordado que hay un hábeas corpus pendiente ante el Tribunal Constitucional que pide la libertad de Fujimori.
EUROPA PRESS