Cerro Canajagua, identidad y vida para el pueblo santeño

? Con una elevación de 830 metros sobre el nivel del mar, es un bastión cultural y natural para la provincia de Los Santos.

Canajagua no solo es un ícono de la historia y la cultura tradicional del pueblo santeño, también se ha convertido en una importante fuente de vida natural y una reserva que promueve el desarrollo de recursos naturales para la región de Azuero.

Con una altitud de 830 metros sobre el nivel del mar y punto de límite entre los distritos de Guararé, Las Tablas y Macaracas, este emblemático cerro, resguarda estampas naturales importantes para el ecosistema de la región central del país.

Más de 3,000 hectáreas de verdor y vida natural, es un importante espacio con fauna y flora; con especies endémicas de la región de Azuero. En los últimos tiempos, tanto pobladores como el gobierno y organizaciones ambientales y de desarrollo, han unido esfuerzos para resguardar y proteger esta reserva natural y buscan que mediante una ley se convierta en un parque nacional para que tenga el aporte y el apoyo necesario por parte del gobierno nacional.

El cerro Canajagua es una de las más importantes elevaciones, de la cordillera oriental y de la región central del país, específicamente de la península de Azuero que incluye a las provincia de Los Santos, Herrera y el sur de Veraguas. El cerro forma parte del macizo del Canajagua y está ubicado en el centro de la provincia de Los Santos.

En la década de los 60, el cerro Canajagua tuvo su primera carretera, con lo que campesinos y comerciantes pudieron ingresar a esta área, y con ello sedeforestó el 60% de los bosques debido a la explotación de madera.

En el año de 1990 fue declarado Reserva Forestal, esto por el acuerdo municipal 22, del 31 de julio de 1990 del Consejo Municipal de Distrito de Las Tablas. La reserva cuenta con 30 kilómetros cuadrados de extensión y es considerada como una reserva hídrica de la provincia de Los Santos ya que allí nacen los principales ríos de la región, entre ellos el río Guararé con una extensión de con 34 kilómetros, el Oria con 67 kilómetros, el Estivaná con 27 kilómetros, principal afluente del río La Villa, también nace el río Perales 20 kilómetros de extensión. Igualmente los ríos Cacao, Sario, Monagrillo, Valle y el río Quema, que contribuyen al desarrollo agroindustrial de la provincia de Los Santos.

Diversos estudios señalan que la reforestación del cerro Canajagua y de su más de 3,000 hectáreas de reserva natural son fundamentales para la supervivencia no solo de la provincia de Los Santos, sino para la región central del país pues además de proveer una impacto turístico y productivo en la región, es uno de los puntos más importantes para el resguardo de los recursos naturales y para la exaltación del medio ambiente en la región de Azuero y en la República de Panamá


Proyecto de reforestación

En este contexto, el Plan Nacional de Restauración Forestal que lidera el Ministerio de Ambiente (MiAmbiente), en toda la República de Panamá, lanzó el pasado mes de marzo, el proyecto Fondo de Desarrollo Verde para la región SICA en Panamá, una iniciativa que cuenta con el apoyo y la asesoría técnica de la Unión Europea y también del gobierno de Alemania.

Con este proyecto se busca fortalecer 3,000 hectáreas de bosques del cerro Canajagua y lugares aledaños. Esto comprende las cuencas entre los ríos de Tonosí y La Villa.

El director nacional Forestal de MiAmbiente Víctor Cadavid señaló que el cerro Canajagua es el pulmón de la región de Azuero y con este proyecto de restauración forestal masiva se busca fortalecer y darle vida a esta región que por décadas ha sido deforestada debido a la ganadería expansiva.

La recuperación de estás 3,000 hectáreas se va a lograr a través de la conservación y restauración en la principal área de producción de agua de la zona y de sus áreas aledañas a través de la implementación de sistemas silvopastoriles y forestales y la creación de la Reserva Hídrica con la participación comunitaria de esta cuenca.

Este proyecto va más allá de la aplicación, es un proceso de reparación forestal dado que incluye gestionar un trabajo con las autoridades tanto locales como a nivel nacional para la transformación del cerro Canajagua en una reserva hidrológica a través de un régimen de área protegida, sostuvo el funcionario.

Con la puesta en marcha de este proyecto buscan recuperar unas 1,515 hectáreas de áreas degradadas en bosques intervenidos del cerro Canajagua y 1 485 hectáreas de áreas degradadas en fincas ganaderas ubicadas en regiones críticas el corredor biológico del cerro Canajagua.

Está área que será impactada comprende un paisaje productivo con una fuerte cultura e historia ganadera en una zona netamente marina costera en la que varias de las especies forestales presentes enfrentan serios, problemas para su supervivencia, ya que sus poblaciones se ven disminuidas de forma progresiva o porque su hábitat está siendo destruido.

En ese territorio hay registro de especies endémicas como el mono aullador de Coiba y el mono ardilla, además se reportan 16 especies vulnerables de las cuales uno es anfibio, tres son reptiles, 10 son aves y 2 mamíferos según informes de MiAmbiente.

Con información de MiAmbiente

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