El proyecto de ley que reforma la Caja de Seguro Social es una bonita oportunidad para que los diputados se luzcan, aprobando una ley que una a los panameños. El Ejecutivo cumplió con llevar este proyecto a la Asamblea; ahora toca a los diputados hacerle las mejoras necesarias para sacar una ley fortalecida y que proporcione el oxígeno necesario para la sostenibilidad de la Caja. Pero, hay cambios fundamentales que tienen que hacerse. Por ejemplo, el tema de la edad, el aumento de la cuota patronal y el aspecto sobre el manejo de los fondos de los asegurados por administradoras privadas. Al parecer, esto es lo que está causando más ruido y en ello los diputados pueden poner en práctica alternativas y conseguir los mismos resultados. Está el caso de que hoy para jubilarse se necesitan 240 cuotas y 57 años las mujeres y 62 los hombres. En lugar de aumentar los años, sigamos con la misma edad, pero sí aumentando las cuotas. En este caso, la alternativa a aumentar la edad sería aumentar las cuotas, las cuales ascenderían a 280 sin aumentar la edad. En lugar de aumentar la cuota patronal a tres por ciento, se aumenta el ITBMS solo para artículos suntuosos. Es decir, una persona podría seguir comprando un televisor de 54 pulgadas con un ITBMS del siete por ciento, pero si quiere uno de 64 pulgadas o más, entonces pagaría el 12 por ciento. Ese cinco por ciento adicional pasaría a la Caja y representaría varios millones de dólares. La oportunidad de la Asamblea es aprobar la ley, no debatirla para rechazarla. No hay margen para rechazar, sino para mejorar, fortalecer y salvar la Caja. ¡Así de simple!

Editorial escrito por el periodista Gerardo Berroa Loo