Un nuevo podcast, basado en un informe del BID, analiza los costos del crimen y la violencia en 22 países de América Latina y el Caribe, utilizando un enfoque contable para estimar los costos directos e indirectos. El estudio revela que estos costos son significativos, alcanzando un promedio del 3.44% del PIB en 2022. Esta cifra representa una carga considerable para las economías de la región, equivalente a casi el 78% del gasto público en educación y más del doble del presupuesto para asistencia social. Los costos directos incluyen pérdidas de capital humano por homicidios y otros delitos, así como gastos del sector público y privado en seguridad. El documento también examina los costos indirectos, como el impacto negativo del crimen en el turismo, la productividad empresarial y la migración. La relevancia del estudio para los países de la región es evidente: reducir la violencia y la criminalidad es fundamental para impulsar el desarrollo económico y social, liberando recursos que podrían destinarse a áreas prioritarias como la educación, la salud y la innovación.