Está comprobado científicamente, que la leche es un alimento recomendado para todas las personas sin importar su edad, porque trae múltiples beneficios para la salud, en especial para los niños y adultos mayores ayudándoles a fortalecer su masa muscular y huesos.
Para el nutricionista Rafael Cornes, nutricionista uruguayo Rafael Cornes, hay nutrientes en la leche y derivados que no pueden sustituirse fácilmente. Además, en los niños es aún más determinante el papel que juega la leche en la alimentación. Como es el calcio, que ayuda al desarrollo cognitivo que tiene la leche materna y la de vaca como un elemento insustituible.
De acuerdo con la Federación Panamericana de la Leche (Fepale) lo ideal es que los niños consuman tres vasos de leche al día por ser una excelente fuente de vitaminas y nutrientes que ayudan al crecimiento y desarrollo, además junto a un aseo dental apropiado, puede ayudar a proteger enfermedades en los dientes, como las caries y problemas en las encías.
Pero a partir de qué edad puede un niño empezar a consumir leche de vaca. De acuerdo con Cornes, al año un niño ya es apto para consumir leche entera, pero si el menor resulta ser intolerante a la lactosa, se le puede dar leche o yogurt bajo en lactosa.
Ante la interrogante de qué leche es más saludable, si la de vaca o la de cabra, respondió que ambas.
Beneficios en adultos mayores
Mientras que, en los adultos se pueden encontrar sustitutos, pero no es una solución inmediata. Tanto la leche como los productos lácteos, son incorporados por nutricionistas en la dieta, para prevenir enfermedades óseas como osteoporosis y la fractura de huesos, especialmente en el caso de las mujeres.
Según la FAO un vaso de 240 ml de leche fluida de vaca aporta 23 % de las recomendaciones dietéticas diarias de calcio, el 12 % de zinc y el 33 % de fósforo. Con respecto a las vitaminas, esta misma cantidad aporta vitaminas B2 (35 %), B12 (48 %), A (20 %) y D (15 %).
También es una excelente fuente de proteínas y contiene cientos de diferentes ácidos grasos, incluidos el ácido linoleico conjugado y los omega-3. El ácido linoleico conjugado y los ácidos grasos omega-3 están relacionados con beneficios para la salud tales como un menor riesgo de diabetes y enfermedades del corazón.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda tres porciones diarias de leche o derivados como el yogurt, queso o bebidas derivadas de la leche.
Diversos estudios recomiendan el consumo de leche para quienes realizan actividades físicas porque es una gran bebida hidratante. Consumirla tras hacer ejercicio beneficia a los músculos y a la hidratación.
Son varios los estudios que han revelado que beber leche se asocia con un menor riesgo de pérdida muscular relacionada con la edad. De hecho, el mayor consumo de leche y productos lácteos se ha relacionado con una mayor masa muscular de todo el cuerpo y un mejor rendimiento físico en los adultos mayores.
La OMS indica que diversos estudios apuntan a que la leche y sus nutrientes, como el calcio, la vitamina D, la lactoferrina y las proteínas del suero de leche, tienen efectos positivos sobre la reducción de posibilidad de contraer cáncer, especialmente el de colon.
¿Bebidas vegetales pueden sustituir la leche?
Ante la interrogante de que si las bebidas vegetales, como la de soja, almendra, coco, nuez y castaña pueden sustituir la leche, el nutricionista indicó que no.
Ya que, estas bebidas no proceden de ninguna glándula mamaria ni deben ofrecerse como sustitutos directos, pues son bebidas vegetales con base en agua con alguna semilla y nutrientes que no tienen nada que ver con la leche.
Estas bebidas no tienen nutrientes como el iodo, potasio, zinc y otros que son puntales en la leche, ni las proteínas muy propias de la leche y que no se encuentran en otros productos. No son dañosas, pueden tomarse y no hacen daño, pero no sustituyen a la leche, explicó.