En una histórica Audiencia Jurada acerca de la presencia de Objetos Voledores No Identificados (Ovnis), e Inteligencias no humanas en el Capitolio de los Estados Unidos, tres militares retirados del ejército estadounidense aseguraron que este país mantiene cautivos aeronaves no construidas por los seres humanos.

Bajo la gravedad del juramento ante el Congreso de los Estados Unidos, David Grusch, Ryan Graves y David Fravor, aseguraron que no solo existen evidencias de presencia alienígena en la Tierra, que Estados Unidos mantiene bajo su custodia «cuerpos de inteligencia no humana», y además, ha logrado recuperar «restos biológicos no humanos, provenientes de naves voladoras no identificadas».

David Grusch, oficial de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y ex oficial de inteligencia, señaló que Estados Unidos ha estado al tanto de una Inteligencia No Humana en el Planeta Tierra desde la década de 1930.

En su declaración, Grusch declaró que el Pentágono «mantiene naves extraterrestres en su poder» aseguró que conoce las localizaciones exactas en que se encuentra cada una de esas naves, después de entrevistar a 40 testigos, y recopilar información sobre el particular.

También enfatizó que los «Estados Unidos está ocultando un programa de larga data que recupera y aplica ingeniería inversa a Ovnis, haciendo pruebas que se mantienen bajo estricto secreto por parte de diferentes administraciones gubernamentales».

Por su parte, el piloto retirado de la marina estadounidense, David Fravor, describió cómo durante un ejercicio de entrenamiento sobre el Océano Pacífico, realizado en el año 2004, los controladores de radar identificaron un objeto no identificado.

Entretanto, el Pentágono negó las afirmaciones que se hicieron en esta audiencia a través de la portavoz del Departamento de Defensa, Sue Gough, quien aseguró que «no existe ninguna información verificable, para corroborar las afirmaciones de que haya existido en el pasado, o exista actualmente algún programa relacionado con la posesión o la ingeniería inversa de materiales extraterrestres».

El Congreso de los Estados Unidos busca abrir una nueva ruta que permita una investigación y divulgación de los fenómenos alienígenas, luego de numerosos intentos durante varias décadas, por romper el hermetismo sobre el tema.