La selección nacional de fútbol perdió 4-0 ante su similar de Brasil, en su estreno en un campeonato mundial de este deporte.
El choque disputado en el Hindmarsh Stadium de Adelaide, Australia, resultó un monólogo en el que las cariocas llevaron la voz cantante, teniendo la pelota, manejando la media cancha y desbordando por las bandas. Le correspondió a la arquera nacional Yenith Bailey contener el aluvión brasileño.
Ary Borges, quien hizo un hat trick y Beatriz Zaneratto, anotaron los goles para el conjunto brasileño, que sabiéndose dominador del partido, bajo un poco la velocidad en el segundo tiempo.
El técnico Ignacio Quintana realizó algunos cambios para la segunda mitad de juego, trayendo a Riley Tanner, Wendy Natis y Emily Cedeño, notándose un Panamá algo más ofensivo, con Tanner realizando dos remates al marco de la portera brasileña Leticia.
A pesar de la derrota, las panameñas sintieron el orgullo de ser las primeras en representar al país en un campeonato mundial de fútbol en la rama femenina.
Martha Cox reconoció que la inexperiencia y el nerviosismo del primer tiempo fueron claves en el resultado del primer tiempo. «Nos costó tener la pelota, tenemos que trabajar en esto para el partido del sábado ante Jamaica. Sabemos que ese juego es clave, si queremos tener chance de pasar a la segunda ronda», apuntó la experimentada jugadora.
Por su parte, el técnico «Nacho» Quintana evaluó lo ocurrido como «una enseñanza más», valorando «el sacrificio que estas chicas hicieron para jugar ante uno de los mejores equipos del mundo».
«Si queremos jugar a este nivel, tenemos que aprender a jugar estos partidos», apuntó el estratega nacional, quien indicó que a partir de lo sucedido ante Brasil, se va a preparar el encuentro del próximo sábado ante Jamaica.
«Vamos a descansar un poco, a recuperar a las que jugaron y a analizar quiénes iniciarán el segundo partido. Sabemos que es un encuentro de mucha importancia y lo tomamos como una final», destacó Quintana.