Fiscales de 18 estados de Estados Unidos han hecho un llamado de urgencia al gobierno federal para retirar del mercado varios modelos de automóviles de las empresas coreanas Kia y Hyundai, debido a que aparentemente pueden ser robados con facilidad.
De acuerdo con los fiscales, los vehículos de Kia y Hyundai vendidos en Estados Unidos en la última década no tienen inmovilizadores de motor, una función estándar en la mayoría de los autos que evita que el motor arranque a menos que la llave esté en el vehículo.
Los fiscales alegan esto ha generado un aumento de robos de estas marcas de vehículos, impulsados por un desafío viral en la red social TikTok.
Videos que circulan en la red social han mostrado cómo se pueden encender estos carros utilizando únicamente un destornillador y un cable USB. En Los Ángeles, los robos de vehículos Kia y Hyundai aumentaron 85% en 2022, y actualmente representan el 20% de todos los robos de vehículos de la ciudad, de acuerdo con la procuraduría general de California.
Estos robos inspirados en desafíos de tikTok a menudo han terminado en tragedia, y la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras atribuyó 14 accidentes automovilísticos y ocho muertes a la moda de robar autos.
En octubre de 2022, un comisionado de policía dijo que un accidente automovilístico en Buffalo, Nueva York, que causó la muerte de cuatro adolescentes podría haber estado relacionado con el desafío de TikTok. En el incidente, un total de seis adolescentes iban a exceso de velocidad en un Kia que se estrelló, de acuerdo con la policía de Buffalo. El vehículo había sido reportado como robado.
“La conclusión es que el hecho de que Kia y Hyundai no instalaran características de seguridad estándar en muchos de sus automóviles ha puesto en riesgo a los propietarios de vehículos y al público”, dijo el procurador general de California, Rob Bonta, en un comunicado de prensa.
El fiscal de california añadió que “en lugar de asumir la responsabilidad con medidas correctivas adecuadas, estos fabricantes de automóviles han optado por pasar este riesgo a los consumidores y nuestras comunidades”.
Bonta y los otros fiscales generales enviaron una carta el jueves a la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras en la que pidieron un llamado a revisión de los vehículos a nivel nacional. La misiva también estuvo firmada por los fiscales generales de Arizona, Colorado, Connecticut, Illinois, Massachusetts, Maryland, Michigan, Minnesota, Nueva Jersey, Nuevo México, Nueva York, Oregon, Pensilvania, Rhode Island, Vermont, Washington y el distrito de Columbia.
Ante esta solicitud, la empresa Kia respondió a través de un comunicado que está enfocada en el problema y que siguen tomando medidas para atender las inquietudes que han planteado los fiscales. Además, el fabricante de autos aseguró que se ha instalado un software en los vehículos de más de 165,000 clientes y que más de 2 millones de propietarios han sido contactados sobre el problema. La compañía comunicó que sus vehículos cumplen con las normas de seguridad federales, por lo que no es necesario un llamado a revisión.
La empresa Hyundai también dijo que sus vehículos cumplen con los requisitos antirrobo del gobierno. También señaló que ha distribuido una actualización de software para evitar los robos dos meses antes de lo previsto, pero no respondió una pregunta sobre cuántos vehículos la han recibido