El organismo indicó que su participación estará sometida a las condiciones adicionales de competir «bajo la bandera paralímpica y el himno paralímpico» y de no estar «incluidos en el medallero». Además, las dos delegaciones deberán cubrir sus simbologías en sus uniformes «en todas las ceremonias oficiales y competiciones deportivas».
Por otro lado, el CPI recalcó que «no realizará ningún evento en Rusia o Bielorrusia hasta nuevo aviso». «Esto incluirá Campeonatos Mundiales y Europeos, así como todas las competiciones de nivel como Series Mundiales, Copas del Mundo y Grand Prix», añadió, pidiendo a cada federación nacional seguir esta recomendación.
Además, decidió retirar la distinción al presidente de Rusia, Vladimir Putin, de Honor Paralímpico, y la Orden Paralímpica a varios miembros rusos. En una próxima Asamblea General Extraordinaria se tomará la decisión suspender o terminar con la condiciones de miembro del Comité Paralímpico Ruso y el Comité Paralímpico de Bielorrusia.
«El CPI y el Movimiento Paralímpico en general están muy preocupados por la grave violación de la Tregua Olímpica por parte de los gobiernos de Rusia y Bielorrusia en los días previos a los Juegos Paralímpicos de Pekín. La Junta de Gobierno del CPE está unida en su condena de estas acciones y estuvo de acuerdo en que no pueden pasar desapercibidas o desatendidas», expresó Andrew Parsons, presidente del CPI.
Este recalcó que a la hora de tomar sus decisiones fue «fundamental» que trabajaran «dentro del marco» de su normativa «para permanecer políticamente neutrales y dentro del Manual del CPI». «Tal neutralidad está firmemente anclada en la creencia genuina de que el deporte tiene el poder transformador para superar nuestras deficiencias y sacar de nuestro interior lo mejor de nuestra humanidad, especialmente en los momentos más oscuros», subrayó.
El dirigente brasileño cree que han infligido «el castigo más severo posible» dentro de su normativa y que tras Pekín 2022 estudiarán «si cualquier incumplimiento de la Tregua Olímpica para futuros Juegos Paralímpicos podría conducir a la posible suspensión o prescripción de un Comité Paralímpico Nacional».
«Es profundamente decepcionante que se requiera tal acción. Sin embargo, la Junta de Gobierno cree que es necesario para que los gobiernos rindan cuentas por las acciones que impactan directamente en el Movimiento Paralímpico, los Juegos Paralímpicos y los atletas paralímpicos. Esto es así especialmente dados los orígenes del Movimiento Paralímpico, que surgieron de los terribles acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial», añadió Parsons.
Ahora, el presidente del CPI espera que el resto de participantes en los Juegos de Pekín «traten a los deportistas neutrales como lo harían con cualquier otro, sin importar lo difícil que sea». «A diferencia de sus respectivos gobiernos, estos deportistas y directivos no son los agresores, están aquí para competir en un evento deportivo como todos los demás», recordó.
«Los ojos del mundo estarán atentos a los Juegos en los próximos días. Es vital que mostremos a los líderes mundiales a través de nuestro deporte que podemos unirnos como seres humanos y que nuestro verdadero poder se encuentra al promover la paz, la comprensión y la inclusión. Este es el núcleo de lo que hace el Movimiento Paralímpico y lo que representa. No debemos perder de vista esto ahora, sin importar las circunstancias», sentenció Parsons.
EUROPA PRESS
