«Empezaremos a pagar los salarios de los funcionarios hoy mismo», dijo el portavoz del Ministerio de Finanzas, Ahmad Wali Haqmal, en una conferencia de prensa en Kabul.
El gobierno abonará a los funcionarios los salarios de los últimos tres meses, más un mes para los que no lo habían cobrado con el gobierno anterior.
Haqmal también informó que el gobierno iba a volver a pagar las pensiones, cuando los servidores informáticos vuelvan a estar operativos.
Los funcionarios no podrán retirar el dinero de inmediato, ya que los retiros de los bancos afganos siguen limitados por las autoridades a 200 o 400 dólares por semana, según la institución, debido a la falta de efectivo disponible.
Las restricciones bancarias están en vigor desde que los talibanes volvieron al poder tras una guerra de 20 años contra el gobierno de Kabul y sus aliados occidentales, lo que provocó sanciones internacionales.
La economía del país, uno de las más pobres del mundo, se hundió. El gobierno se quedó sin dinero, la moneda local, el afgano, cayó en picado y la pobreza se disparó, al igual que el precio de la canasta básica.
Según Meraj Mohammad Meraj, uno de los directores del ministerio, el gobierno puede volver a pagar a los funcionarios tras unos ingresos por concepto de aduanas e impuesto de sociedades de unos 26.000 millones de afganis (277 millones de dólares) en los últimos dos meses y medio.
AFP