Los reguladores de Estados Unidos no consideran necesario aplicar dosis adicionales de la vacuna de Pfizer-BioNtech, reportó The New York Times.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ayer se manifestó en contra de la priorización de Pfizer-BioNtech para que se autorice una dosis de refuerzo.
E instó a las compañías a que anticiparan el biológico al mecanismo COVAX.
La OMS ha alertado de la escasez de vacunas en las economías pobres, y ha llamado a que se liberen las licencias para expandir la producción.
El organismo manifestó que no existe evidencia de que se requiera una tercera dosis.
Israel comenzó a aplicar una tercera dosis
En Estados Unidos, la declaración de los reguladores federales, se produjo luego de concluir una reunión privada anoche, con los representantes de Pfizer.
El encuentro, como explicó el diario, tenía como finalidad favorecer la autorización de forma rápida de esta dosis de refuerzo contra la COVID-19.
En tanto, Israel comenzó ayer, a administrar terceras dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech a pacientes de trasplante de corazón y otros con sistemas inmunológicos comprometidos.
Los funcionarios expresaron que se necesitarían más datos, y posiblemente varios meses más, antes de que los reguladores pudieran determinar si eran necesarias las inyecciones de refuerzo.
Expertos estadounidenses, incluido Anthony Fauci, principal asesor médico del presidente Joe Biden para la pandemia, han dicho que aún no hay pruebas suficientes de que los refuerzos sean necesarios.
Algunos, sin embargo, dicen que la medida de Israel puede presagiar una decisión del gobierno de al menos recomendarlos para los vulnerables.
Pfizer está recopilando información sobre las respuestas de anticuerpos en aquellos que reciben una tercera dosis.
Además de los datos de Israel, espera enviar al menos parte a la Administración de Alimentos y Medicamentos en las próximas semanas con una solicitud formal para ampliar la autorización de emergencia.
«No hubo nada parecido a una decisión»: Fauci
Pero la decisión final sobre las vacunas de refuerzo, dijeron varios funcionarios después de la reunión, también dependerá de la información del mundo real recopilada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Esta agencia, reúne datos en torno al avance de las infecciones que causan cuadros graves u hospitalización, y las que ocurren en personas vacunadas.
“Fue una reunión interesante. Compartieron sus datos. No hubo nada parecido a una decisión «, dijo Fauci en una breve entrevista, ayer en la noche.
«Esta es solo una pieza de un rompecabezas mucho más grande, y es una parte de los datos, por lo que no hay duda de que es convincente de una forma u otra», citó el Times.
Entre las preguntas que se tendrán que dilucidar está el tipo de refuerzo.
Si, sería una tercera dosis de la vacuna original, o quizás una adaptada a la variante Delta, que es altamente infecciosa; y que está creciendo en los Estados Unidos.
Con menos de la mitad de la población completamente vacunada, algunos expertos dijeron que el país necesitaba mantenerse enfocado en inocular todos los estadounidenses con la primera dosis.
La tarea más importante de la Administración de Alimentos y Medicamentos, es aumentar la confianza del público al otorgar la aprobación total a las vacunas contra el coronavirus en uso, reseñó el diario.