Nadie desviará la agenda oficial

Foto.@NitoCortizo

Independientemente de lo que haga el gobierno, trilla como una norma de algunos sectores, imponer sobre su mensaje o sus medidas, herramientas poco ortodoxas para con una situación como la que vive el país con la pandemia de covid-19.

Ahora queda claro que las descalificaciones que se realizan a través de las redes solo constituyen abono calculado para atacar luego desde posiciones abiertas la agenda oficial, presionar a las autoridades y minar su voz ante la opinión pública.

El presidente Laurentino Cortizo Cohen presentó este dos de enero ante la Asamblea Nacional un pormenorizado informe sobre las acciones económicas para encarar, tanto los retos de la pandemia, como para dar norte a la economía nacional.

Desde el estado desastroso en que su gobierno encontró el país (muchos olvidan, o no es cosa que les importe, que ya desde abril de 2019 Panamá estaba al borde de la recesión, otros se montan en el prestigio de líderes internacionales para que el pueblo olvide todas las degradaciones en que incurrieron cuando dirigieron el país); hasta las propuestas y medidas para hacer de la vacunación y la reactivación económica las grandes tareas de 2021, pasando por todo lo que ha habido que solicitar a las entidades financieras internacionales para el manejo de una pandemia y el próximo inicio de la vacunación.

Hablan del acelerado monto de la deuda pública, y pasan por alto que tanto la pandemia como los huracanes han estado a la base de ese endeudamiento; hay tanto cinismo en su señalamiento que omiten y tratan de que los demás omitan los grandes escándalos y la falta de “rendición de cuentas” de los dos gobiernos anteriores. ¿Con qué y cómo se podían llevar adelante el país si dejaron desorden, gastos y deudas viejas por pagar? ¿Cuánto se fumigaron en diez años? ¿Puede omitirse este episodio con honestidad? ¿Qué discurso tratan de imponer?

Uno por uno, Cortizo desglosó gastos, en un evidente intento por dar respuestas a aquellos que habían venido pidiendo “rendición de cuentas”; detalle por detalle el presidente de la República informó al país qué se obtuvo, cómo se gastó y en qué nivel de deuda nos encontramos.

Pero resulta que eso ahora ya no es importante ni suficiente, porque según algunas voces “no tocó lo que se esperaba”, dijo lo mismo que había dicho antes y ha dicho verdades a medias. Bueno es lo mismo que ha caracterizado su política antigubernamental desde el día cero. Nada nuevo hay, ni habrá, en esas críticas, aunque la administración Cortizo dé muestras de buen desempeño o sacrificios.

Lo bueno de esos señalamientos desde la otra acera es que pone en evidencia quién está por salvar vidas de panameños y quiénes por aprovecharse de la tragedia que vive Panamá (y el mundo) para promover ofertas que antes, en el poder, fueron incapaces de considerar. Pareciera que tratan de lavar un rostro corrupto e impopular utilizando al gobierno como caballito de batalla y acusaciones que no salen del supuesto, y que dan por realidad después de repetir una y otra vez la misma mentira.

Pese a que lo saben, dejan de lado, para bien o para mal, las características propias de país de tránsito que tiene Panamá, pero que se agrava por una indisciplina social a la que contribuye la desautorización y el acoso que emana de aquellos que creen que pueden montar sus proyectos políticos encima de los hombros de nuestra sociedad.

Durante diez años el país estuvo sometido a la política de los megaproyectos, ya se sabe con qué intención. Desde julio de 2019 la Sexta Frontera es la política oficial, la lucha contra la pobreza, la atención a aquellos olvidados durante un decenio. Por eso todos los subsidios sociales han sido pagados, las deudas atrasadas etc.

Aun cuando Cortizo dejó claro que la logística para iniciar la vacunación estaba lista, que las vacunas han sido pagadas, y el periodo de tiempo en que se iniciará el proceso de vacunación, hay quienes creen que llegó el momento de poner la cabeza oficial bajo la guillotina. Se equivocan. En el gobierno hay mucha más fortaleza que el que su egoísmo y su oportunismo permiten ver. La administración Cortizo llegó para cumplir una agenda, el informe del dos de enero ha dicho cuanto ha hecho, y cuanto seguirá haciendo, aun cuando los ataques a la institucionalidad estén a la orden del día. Nadie desvirará la agenda oficial.

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