El presidente de la República, José Raúl Mulino, aseguró que Panamá no se presentará a una negociación sobre el tema minero, hasta que se suspendan todos los procesos legales y arbitrajes interpuestos por la empresa First Quantum, por el cierre de la mina de Donoso, provincia de Colón.
Durante la primera rueda de prensa formal del mandatario panameño, la cual se llevará a cabo los días jueves de cada semana, mientras dure su período presidencial, Mulino reconoció que si bien el cierre de la mina ha tenido un fuerte impacto en la economía del país, no es posible que el país sea sometido a presiones por parte de los empresarios mineros.
Debe recordarse que el pasado 12 de julio, la empresa corporación Franco-Nevada, con base en Canadá, interpuso un arbitraje contra Panamá, cuya Corte Suprema de Justicia declaró inconstitucional en noviembre del año pasado, el contrato que ligaba a First Quantum con el país, para la extracción de cobre y otros minerales.
Los demandantes aseguran tener daños económicos iniciales por más de 5 mil millones de dólares. El cese de actividades en la mina, además de las pérdidas aludidas por los empresarios, ha generado cierta contracción en las finanzas estatales, impactando principalmente en el Producto Interno Bruto (PIB), lo que ha hecho que se plantée una revisión de las finanzas públicas.
Al consultársele sobre el asunto, el presidente Mulino aseguró que Panamá «no va a ir con una pistola en la cabeza a sentarse a arreglar ningún problema», en relación con las demandas y arbitrajes internacionales que gravitan sobre la decisión del cierre de la mina.
«Para que representantes del Gobierno se sienten a conversar con acreedores, banqueros, todos esos procesos se tienen que suspender», manifestó el Presidente.