La saltadora venezolana Yulimar Rojas demostró su condición de gran favorita en el concurso de triple salto de los Campeonatos del Mundo de Atletismo que se están disputando en Eugene (Estados Unidos) y se colgó sin grandes problemas su tercer oro, aunque no lo pudo hacer con una exhibición como el pasado verano en Tokio.
La actual campeona olímpica era la rival a batir en la final del triple salto y no falló en su defensa del reinado mundial que ostenta desde el 2017, pese a que no pudo ni siquiera acercarse al espectacular récord del mundo que marcó en los pasados Juegos con 15.67 metros.
Rojas fue la única de las finalistas que fue capaz de superar los 15 metros y le bastó un salto de 15.47 metros, mejor marca mundial de 2022, para hacerse con el oro con mucha autoridad por delante de la jamaicana Shanieka Ricketts (14.89) y de la estadounidense Tori Franklin (14.72), que completaron el podio.
«Quería un salto más largo, pero estoy feliz de volver a este hermoso estadio y de ver a la multitud. Cada reunión, grande o pequeña, es un desafío para mí y vine con el objetivo de acercarme a mi récord mundial, pero el viento afectó a mi carrera. Traté de adaptarme, pero lo más importante era ganar la medalla y mantener la consistencia en los 15 metros», expresó la venezolana, que hizo su gran debut internacional en 2014 precisamente en el estadio donde se están celebrando estos Mundiales.