El envío contiene material médico para curar los soldados heridos, equipamientos para un hospital de Kabul, chalecos antibalas, camiones de lucha contraincendios y material pedagógico para ayudar a los niños a localizar y esquivar minas terrestres, indicó el portavoz.
«La situación de seguridad en Afganistán sigue muy difícil, por ello estos suministros llegan en un momento importante», declaró el portavoz interino de la OTAN, Dylan White.
«Aunque retiramos nuestras fuerzas del país, continuamos apoyando a Afganistán, especialmente suministrando equipamientos para ayudar a las fuerzas afganas a garantizar mejor su propia seguridad», dijo White.
La decisión de Estados Unidos de retirar rápidamente sus unidades en Afganistán empujó a sus aliados implicados en la misión de la OTAN Apoyo Decidido a repatriar también sus tropas.
Alrededor de 2.500 estadounidenses y 7.000 militares de otros países participaban en esta operación de formación del ejército afgano.
En claro retroceso desde mayo, cuando comenzó la retirada definitiva de las tropas extranjeras, las fuerzas gubernamentales combaten para repeler los ataques de los talibanes contra grandes ciudades del país como Kandahar, Herat y Lashkar Gah.
AFP