Unos 228 millones de personas, en su mayoría niños, están en riesgo de contraer enfermedades como el sarampión, la fiebre amarilla y la polio, debido a la interrupción de las campañas de vacunación masiva por la pandemia.
En el marco de la conmemoración de la semana mundial de la inmunización, la Organización Mundial de la Salud (OMS), UNICEF y Gavi, la Alianza de Vacunas; en una declaración conjunta advirtieron hoy que, si bien los servicios de inmunización han comenzado a recuperarse, millones de niños son vulnerables a enfermedades mortales.
Los organismos destacaron “la necesidad urgente (de asumir) un compromiso global renovado para mejorar el acceso y la aceptación de la vacunación”.
«Las vacunas nos ayudarán a poner fin a la pandemia de COVID-19, pero solo si garantizamos un acceso justo para todos los países y construimos sistemas sólidos para administrarlas», dijo el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS.
«Y si queremos evitar múltiples brotes de enfermedades potencialmente mortales como el sarampión, la fiebre amarilla y la difteria, debemos asegurarnos de que los servicios de vacunación de rutina estén protegidos en todos los países del mundo».
Una encuesta de la OMS encontró que, a pesar de los avances en comparación con la situación en 2020, más de un tercio de los países encuestados (37%) todavía informan de interrupciones en sus servicios de inmunización de rutina.
Unas 60 campañas masivas están pospuestas en 50 países, poniendo en riesgo a 228 millones de personas, en su mayoría niños. Más de la mitad de los 50 países afectados se encuentran en África, dejando al descubierto las desigualdades prolongadas en el acceso a inmunización fundamentales.
Cobertura de vacunación continúa a pesar de la COVID-19
Este año, el país no participará en la semana de inmunización de las Américas, porque está trabajando en la inoculación en contra de la COVID-19, respondió a Destino Panamá, la coordinadora del Programa Ampliado de Inmunización (PAI), Itzel de Hewitt.
Sin embargo, aclaró que *durante la pandemia en 2020 la cobertura de la vacunación rutinaria alcanzó un 70%*.
La construcción de confianza en los padres, la adecuación de sitios libres de COVID-19, y el acompañamiento de gremios como la Asociación de Pediatras, contribuyeron con este objetivo.
Durante la vacunación en contra de la influenza, “no se descartó ni una sola dosis del millón que se solicitaron”, dijo Hewitt, concluyendo que fue exitosa a pesar de que en marzo se decretó la emergencia nacional por la COVID-19.
Independientemente de que la cobertura bajó, con los recursos existentes; las campañas en Panamá han continuado. No se ha dejado de vacunar.