Corría el año 2003 y el mal tiempo le jugó una mala pasada al reconocido periodista y exembajador Mario Castro Arenas al ir conduciendo su automóvil. Su vehículo quedó de un momento a otro en medio de un río y durante 30 minutos estuvo atrapado dentro de él. El motor se apagó y las ventanas se atascaron. Por suerte, la anécdota tuvo un final feliz y personal de Sinaproc logró extraer su figura de mediano peso y en andas lo dejó en un lugar seguro. El hecho fue registrado por todos los medios periodísticos.
Casos como este no son únicos. Se repiten una y otra vez en cada temporada lluviosa. Nadie debiera sorprenderse. Sin embargo, muchos conductores y residentes se encuentran con subidas de la corriente, con el desbordamiento de los ríos debido a los desagües colapsados.
No solo se trata de barriadas alejadas ubicadas junto a los ríos. Se han registrado vehículos varados en avenidas principales como Vía España, Avenida Balboa, Calle 50, Ricardo J. Alfaro, entre otras vías importantes. Los expertos recomiendan tomar un desvío antes que atravesar una calle inundada, muchas veces, se desconoce la profundidad y la fuerza de la corriente.
De acuerdo con www.pruebaderuta.com si el auto se quedó varado en medio del agua, lo mejor es no intentar arrancarlo nuevamente porque si el motor se apagó es posible que el agua haya ingresado a uno de los cilindros, y al girar la llave para ponerlo en marcha agravará los daños, ya que puede ingresar más agua al bloque del motor generando daños mecánicos graves.
Los conductores deben evitar ser víctimas de esos estragos. Es muy grave para los automóviles a nivel mecánico, electrónico, de tapicería y carrocería. Lo mejor es contar con un seguro completo, que cubra este tipo de calamidades.
¿Habrá alguna solución o debemos resignarnos a los azares del mal tiempo? La respuesta está en atender las causas y la principal, es la suciedad de los desagües. Se acumulan las basuras, se atascan las tuberías y el agua de los ríos se atora y fluye lentamente hacia al mar.
La temporada seca es el momento clave para darle mantenimiento y prevenir los futuros percances. Así lo destacó el Ministerio de Obras Públicas, que informó que “para aprovechar la temporada seca se está construyendo y mejorando los diversos sistemas de drenajes pluviales”.
Se están ampliando las losas de las alcantarillas de cajón que atraviesan las quebradas, se están construyendo vados, tuberías y cabezales de hormigón. Además, se están limpiando las cunetas, removiendo la basura y la masa vegetal para mejorar la circulación del agua en la temporada de lluvias, a la vez que se están realizando trabajos de dragado en quebradas y ríos.
Esperemos que se esté cumpliendo con eficiencia esos trabajos. Sin embargo, tales acciones que verano a verano se realizan parecen no ser suficientes y aquí los ciudadanos tienen un rol que no están cumpliendo. Las fuertes lluvias dejan caer grandes cantidades de agua que necesitan salir al mar pero no pueden debido a que son bloqueadas por la basura.
Debido a un descuido generalizado los desechos terminan en cualquier lado. Más que un mal hábito, es una verdadera cultura que se ha mantenido de generación en generación. Familias de diversos ingresos utilizan lotes baldíos para dejar bolsas de basura que terminan en las calles y luego en el alcantarillado. También, bloquean el paso del agua los diferentes materiales de las obras de construcción.
Mientras no haya una conciencia y responsabilidad por la disposición de desechos, seguirán bloqueando la salida del agua de los ríos y en temporada de lluvias se continuarán anegando las calles y avenidas.
Una experiencia reveladora es el trabajo de la barrera BOB, iniciativa de la fundación Marea Verde, que logró demostrar cómo los ciudadanos lanzan toneladas de basura hacia el mar. No solo desperdicios orgánicos, plásticos y de uso doméstico, sino que también objetos de mayor tamaño como neveras, llantas y colchones.
Sin duda, este es un problema grave que hace crisis cuando caen las lluvias y se anegan las calles. La necesidad de hacer un cambio de mentalidad requiere del aporte de los medios de comunicación y de la educación a todos los niveles.