El polo, un deporte lleno de pasión y adrenalina que se realiza sobre el lomo de un caballo, y que solo aparece en revistas del jet set internacional, tiene 25 años desarrollándose en Panamá.
Todo empezó en la década de los 90 cuando los hermanos Serrano, guatemaltecos hoy radicados en Panamá, dieron el primer paso para hacer de esta disciplina del galope un deporte del más alto nivel, utilizando la única cancha apta para el juego, la Hacienda Country Club en Cerro Azul.
“Más que un hobby se ha intentado promocionar la disciplina con actividades de temporada que va de diciembre a abril de cada año, para aprovechar la época seca” indicó Amelie Serrano, quien forma parte del grupo impulsador.
Añade que es un deporte que ha avanzado mucho en Panamá, aunque a diferencia de otros deportes requiere de factores importantes que limitan la participación de más personas, como la atención de los caballos, inversiones económicas y de tiempo. Que quizás por eso al polo lo destacan como un deporte de lujo y de los reyes.
Según Jorge Serrano Bianchi, el impulsor de la disciplina en Panamá y apasionado de este deporte, fue en el año 93 cuando arrancó todo este movimiento ecuestre.
“Veníamos de Guatemala con esa tradición. Llegamos a Panamá con ganas de tener una propiedad, para convertirla en un lugar para practicar este deporte”, señaló Serrano en una entrevista.
El conocedor agrega que al regresar uno de sus hermanos de Argentina –donde se hacen torneos mundiales de polo- se empezó a desarrollar este sueño. “A finales del 93 empecé y comencé de cero en un potrero que mandé a limpiar en Cerro Azul”, dijo.
Serrano explicó que en 1996 se hizo formal el juego y se invitó a otras personas. “Se trajeron jugadores de afuera, para participar del torneo en Panamá y en 2007 se crea la Asociación Panameña de Polo (APP)”, acotó.
El polo se desarrolla entre dos equipos, de cuatro jugadores a caballo cada uno, intentando llevar una pelota de madera o plástico, con un taco o mazo, a la portería rival, formada por dos postes de mimbre para marcar goles.
En Panamá, sólo se juega la categoría masculina, aún no hay equipos de mujeres, sin embargo, hay jóvenes que lo practican. Mientras que hay otras que se involucran en los concursos de sombreros al final de certamen, en los cuales se premian los mejores sombreros.
Cómo se juega
Entre los torneos celebrados localmente están: el Abierto de Polo Copa Embajada de Argentina, Panamá Polo Open y la modalidad Round Robin o Americana (donde todos los equipos se enfrentan a todos) para definir los ganadores. Así mismo, otros donde se han formado equipos, como el Hacienda Country Club Polo. Ya con una Federación establecida se abrió en 2008 la Escuela de Polo en dicha hacienda.
Según Serrano, lo primero que deben saber los futuros polistas es saber montar a caballo. “Primero, los entrenan para que aprendan a montar a caballo, y cuando ya están listos, pasan acá para enseñarles lo técnico-táctico del deporte”.
Comentó que la edad ideal para comenzar a practicar este deporte es a los nueve años. “Nuestra intención principal es hacer que este deporte crezca con el pasar de los años”, finalizó Serrano.
Por su parte, el ex director de la APP Gustavo Morera afirma que la idea es trabajar en la formación de jóvenes que aumentarán la base de jugadores.
“Panamá tiene un gran potencial para el desarrollo de este deporte. «Su excelente imagen internacional y económica actual, su ubicación geográfica estratégica y su vecindad con países con desarrollo de este juego, así como la importancia local de las actividades ecuestres, permiten que se creen las condiciones para que el polo se arraigue en el país», comentó Morera.
Agregó que en la Hacienda de Cerro Azul las instalaciones son de primer nivel, con una cancha, otro sector de prácticas, casi 100 caballerizas, un picadero o cobertizo excelente, que se puede ver en pocas partes del mundo, personal capacitado, y un entorno muy bonito con mucho potencial para crecer, y a pocos minutos de la ciudad.
Regionalmente, la disciplina se practica en: México, Guatemala, Costa Rica, Colombia, Venezuela, Argentina y Brasil.
El origen de la práctica del polo como deporte se desconoce. Se piensa que esta actividad ecuestre se originó en Persia alrededor del siglo VI a.C., ya que los soldados de caballería entrenaban a los jinetes practicando polo. Pero con el paso de las épocas, el deporte se ha modernizado y actualmente es jugado de manera competitiva por selecciones en los cinco continentes. La acción dura aproximadamente dos horas, y se divide en seis períodos o tiempos llamados chukkas o chukkers.
Para los expertos el polo contribuye en la generación de empleos que van desde el transporte de los animales, veterinarios, cuidadores de los equinos y hasta podría ser catalizador de turismo. Sin duda, esta actividad de sano esparcimiento seguirá creciendo y motivando a muchos en Panamá.