La Asamblea Nacional tendrá un descanso bastante corto, tras cerrar la primera legislatura del primer período de sesiones ordinarias. El miércoles de la próxima semana, iniciará un período de sesiones ordinarias, para discutir y tratar de aprobar una serie de necesarias reformas a la Ley Orgánica de la Caja de Seguro Social.
Apenas este 31 de octubre, en el último día de sesiones ordinarias, los diputados aprobaron en votación 43-26 el Proyecto de Ley 143, que dicta el Presupuesto General del Estado para la vigencia fiscal del año 2025, tras discusiones que le dieron la vuelta al reloj.
Ahora, viene un paquete mucho más pesado y complicado de manejar, el cual involucra una de las principales preocupaciones de los panameños: rescatar el programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), cuyos fondos para pensiones y jubilaciones se encuentra en una situación altamente crítica.
El presidente de la República, José Raúl Mulino, promulgó este jueves el Decreto 225, llamando al Órgano Legislativo a sesiones extraordinarias a partir del 6 de noviembre, «para conocer exclusivamente del Proyecto de Ley que modifica la Ley 51 de 2005, orgánica de la Caja de Seguro Social». No habrá otro tema para tratar en estas sesiones, las cuales tienen como plazo para discutir, aprobar o rechazar el documento hasta el 31 de diciembre de 2024, inclusive.
Aún se desconoce qué contiene el documento en sus árticulos. El análisis que hicieron durante varias semanas sectores importantes del quehacer nacional, dejó ver la necesidad urgente de una reforma, que no solo fortalezca la sostenibilidad financiera del sistema, sino que también, garantice la equidad y la eficiencia en la distribución de los recursos.
Y mientras los representantes de los sectores sindicales se mantienen en la posición de que la institución debe permanecer en el subsistema de beneficio definido, el sector privado presentó una propuesta basada en tres pilares fundamentales: una pensión básica universal solidaria financiada por el Estado; un plan de contribución definida obligatorio, con cuentas individuales financiadas por empleadores y empleados, y además, un plan de ahorro complementario voluntario para mejorar los montos de jubilación.
Una vez presentado el proyecto de ley al pleno legislativo, éste lo remitirá a la comisión legislativa de Salud, que preside el diputado Alaín Cedeño. Una vez allí, se conocerá su contenido al ser obligatoria la lectura del documento para su consideración.
Cedeño explicó que la comisión está preparando la metodología con la cual se abordará el proyecto, siendo lo primero, que representantes del Órgano Ejecutivo expliquen en qué consiste esta iniciativa; y posteriormente, debe abrirse un período para que diversos grupos y organizaciones presenten sus consideraciones.
La Asamblea Nacional estará nuevamente bajo el escrutinio público con esta reforma, necesaria e impostergable para un amplio sector de la población, y que requerirá de mesura, sensatez y un alto sentido de responsabilidad política.