Hace pocos días, un cargamento de 46 cajas repletas con bolsas de monedas falsas de un balboa, conocidas popularmente como «martinellis», fue confiscado luego de una redada que realizaron personal del Ministerio Público y la Autoridad de Aduanas.
La carga de monedas falsas fue cuantificada en más de 180 mil balboas. Por el hecho, tres ciudadanos (dos extranjeros y un panameño), se encuentran imputados por la presunta comisión de los delitos contra la fe pública, en la modalidad de falsificación de monedas que iban a ponerse en circulación en el territorio nacional.
El asunto ha tenido repercusión internacional y en España, donde hace algunos meses, fue desarticulada una organización criminal que había logrado introducir más de un millón de euros falsos al mercado legal europeo.
En abril de 2024, y luego de una investigación sostenida durante seis años, la Policía Nacional española junto con los Mozos de Esquadra, cuerpo policial de Cataluña, desmantelaron el mayor taller de fabricación de monedas de 2 euros de Europa, considerado como el más grande de la historia reciente en el país peninsular.
El taller era manejado por la mafia china y operaba en un pequeño pueblo de menos de 10 mil habitantes, ubicado en Villacañas, Toledo. La operación «Doble Estrella», iniciada en el año 2018, concluyó con la detención de 10 personas, considerados por los investigadores como «maestros de la artesanía de monedas».
La organización criminal ya había introducido unas 100 mil monedas de dos euros en el mercado español, y otras 400 mil en distintos países europeos. Se trata de monedas confeccionadas de tal forma que para el común de las personas pasaban por buenas. Estas monedas fueron utilizadas en máquinas tragamonedas, y canjeadas para juegos en casinos, lo que permitió que circularan y los delincuentes pudieran obtener las monedas legítimas, consumando así su delito.
En Panamá, las monedas falsas llegaron desde China ocultas en bolsas dentro de cajas en un barco panameño y fueron retenidas tras observar la descarga de un camión en un comercio.
Tres personas, dos extrajeros de nacionalidad china y un ciudadano panameño, se encuentran imputados por la presunta comisión de los delitos contra la fe pública, en la modalidad de falsificación de monedas que iban a ponerse en circulación en el territorio nacional.
A los tres únicos detenidos por este caso en la denominada Operación Dragón, les fueron aplicadas medidas cautelares, mientras las investigaciones continúan. En este proceso, no se descarta que pueda haber más personas conectadas con este ilícito.