César Luis Menotti, el icónico entrenador que llevó a la selección argentina a conquistar su primer título mundial en 1978, falleció este domingo 5 de mayo de 2024 en Buenos Aires a los 85 años. La noticia fue confirmada por la Asociación del Fútbol Argentino a través de un mensaje en su cuenta oficial.
Menotti se desempeñaba en los últimos años como director de selecciones nacionales de AFA, tras haber forjado una exitosa y trascendental carrera como jugador y entrenador. Nacido el 22 de octubre de 1938 en Rosario, aunque en su DNI figuraba el 5 de noviembre debido a una demora de su padre en inscribirlo, Menotti inició su carrera profesional en Rosario Central, el club del que era ferviente hincha desde niño.
El inicio de una leyenda
Su primera gran conquista como entrenador llegó en 1973, cuando condujo a Huracán a proclamarse campeón del Torneo Metropolitano, el primer título profesional en la historia del club. Aquel equipo, conformado por figuras como Miguel Brindisi, Carlos Babington y el talentoso René Houseman, cautivó a propios y extraños con un fútbol vistoso y ofensivo que se convertiría en el sello distintivo de Menotti.
Ese logro le valió ser nombrado director técnico de la Selección Argentina en 1974, con el ambicioso objetivo de preparar al equipo para el Mundial de 1978 que se disputaría en suelo argentino. En un contexto de inestabilidad política e institucional, Menotti propuso un proyecto a largo plazo basado en el talento juvenil y un estilo de juego revolucionario.
El camino al título mundial
A pesar de las presiones de la dictadura militar que gobernaba el país, Menotti se mantuvo firme en su filosofía futbolística. En un gesto simbólico, invitó a músicos como el Flaco Spinetta, Anacrusa, Castiñeira de Dios, Susana Rinaldi y Binelli a amenizar la concentración del equipo, desafiando las restricciones impuestas por el régimen.
Con un plantel forjado en torno a figuras como Mario Kempes, Daniel Passarella, Osvaldo Ardiles y René Houseman, Menotti logró lo impensable: guiar a Argentina a su primera conquista mundialista. El 25 de junio de 1978, en el Estadio Monumental, la Albiceleste derrotó 3-1 a Países Bajos en la final, escribiendo una página gloriosa en la historia del fútbol nacional.
La polémica con Bilardo
Tras su éxito en 1978, Menotti afrontó un nuevo desafío en el Mundial de España 1982. Sin embargo, la eliminación temprana de Argentina en ese torneo desató una feroz rivalidad con Carlos Bilardo, su antiguo amigo y colega. La prensa exacerbó esta «grieta futbolera», enfrentando las filosofías de juego de ambos entrenadores y generando una división que perduró durante décadas.
Menotti reconoció años más tarde que, si bien existía un debate táctico válido con Bilardo, la controversia se magnificó de manera injustificada en los medios. «Acá hubo una prensa infame, un sector del periodismo que siempre va a tener los zapatos nuevos porque, como dice el tango, ‘siempre van a estar de rodillas'», expresó con dureza.
Legado en clubes y selecciones
Además de su paso por la selección argentina, Menotti dejó una huella imborrable en clubes como Huracán, Boca Juniors, River Plate e Independiente, donde aplicó su estilo vanguardista y formó a numerosos talentos. En sus últimos años, también fue parte del equipo que respaldó a Lionel Scaloni en la gesta que culminó con el título de Argentina en el Mundial de Qatar 2022.
Pero el legado de Menotti trasciende los títulos y los récords. Su pasión por el juego ofensivo, su capacidad para identificar y potenciar talentos, y su compromiso con la belleza del deporte lo convirtieron en un referente para generaciones de jugadores y entrenadores. En sus propias palabras: «Yo no me retiro nunca. Sólo la muerte te puede retirar».