Se esperaba este movimiento. Y sus implicaciones están estremeciendo la NBA, a pocas semanas de iniciar la temporada regular 2023-2024.
Los Portland Trail Blazers acaban de cerrar un intercambio que envía a uno de sus jugadores estelares por más de una década, Damian Lillard, a los Milwaukee Bucks, poniendo punto final a una novela de altas y bajas, en donde el jugador era el centro de atracción.
El descontento del veterano de 11 campañas con Portland y 33 años de edad se incrementó a finales de la temporada pasada, cuando el equipo decidió mantener su elección en el Draft de las últimas dos campañas y no arriesgar nada en el mercado de cambios y la agencia libre.
En cambio, picaron en segunda ronda a Scott Henderson, lo que no fue del agrado de Lillard, quien de inmediato exigió a los Trail Blazers su transferencia a otro equipo, algo que no fue tan sencillo, dada la magnitud e importancia del jugador, y la necesidad de que el canje con otro equipo resultada satisfactorio.
En la operación que además de los Bucks y los Trail Blazers, involucró a a los Phoenix Suns, le permite a Portland adquirir a Jrue Holiday, Deandre Ayton y Toumani Camara, así como una selección desprotegida de primera ronda del draft de 2029 de los Bucks y los derechos de intercambio desprotegidos de Milwaukee en 2028 y 2030.
Por su parte, los Suns reciben a Jusuf Nurkic, Grayson Allen, Nassir Little y Keon Johnson, con lo cual le dan mayor profundidad a su banca, de la que salen Holiday y Ayton, que eran dos pilares saliendo de cambio. Ahora, el tridente que formarán Bradley Beal, Kevin Durant y Devin Booker tendrá mayor apoyo de parte de los jugadores suplentes.
Damian Lillard llega a los Bucks de Milwaukee para convertirlo en un gran favorito para ganar la liga en la campaña 2023-2024. Finalmente, Giannis Antetokounmpo tendrá a un compañero con la experiencia para llegar a las instancias decisivas, y con el hambre de un campeonato para rubricar su carrera.
