Una denuncia por la presunta comisión contra la seguridad colectiva en la modalidad de delitos contra los medios de transporte, interpuso el abogado Adrián Navarro Gutiérrez, en contra de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP).
Navarro Gutiérrez sostiene en la demanda que la seguridad del Canal de Panamá fue puesta en peligro, luego que en la AMP se permitiera el paso del buque MV Ophelia, de bandera panameña y procedente de Venezuela, con una carga de 47 mil 252 toneladas de material DRI-B, «altamente peligroso debido a que tiene un alto grado de explosividad».
El denunciante señala directamente a Rafael Cigarruista, director de Marina Mercante de la AMP, y al funcionario Pablo Martínez, quien funge como inspector, responsabilizándoles de haber relajado los controles de seguridad para permitir el zarpe y tránsito de la nave por la vía interoceánica.
De acuerdo con el abogado denunciante, en marzo del presente año, el buque MV Ophelia llegó a Panamá proveniente de Trinidad y Tobago, aunque su verdadera procedencia era Venezuela, con una carga de 47 mil toneladas de material DRI-B, consistente en hierro obtenido por reducción directa, el cual la embarcación Ophelia venía cargada con 47 mil toneladas de material DRI- B (hierro obtenido por reducción directa), material altamente peligroso cuando es transportado sin inertizar.
Esto significa, que en el material que se transportaba no se produjo la sustitución de una atmósfera explosiva o químicamente reactiva, como el aire ambiente, por un gas inerte o una mezcla de gases neutros para garantizar el mantenimiento de la seguridad o de la calidad.
De esta manera, la carga se torna altamente peligrosa, al incumplirse el proceso relacionado con la protección contra explosivos, el cual impide la formación de mezclas explosivas cuando se transporta este tipo de material.
La denuncia indica que la AMP permitió el paso de esta embarcación desconociendo ordenanzas y normativas internacionales de seguridad para el manejo y traslado de carga peligrosa, establecidas por la Organización Marítima Internacional.
El demandante precisó que el inspector de la AMP, Pablo Martínez, hizo la revisión del buque, en el que no existía un manifiesto de la carga a bordo, además de descubrir la carga de DRI-B, sin inertizar, aparte de que el MV Ophelia no era un buque apto para transportar, ya que una revisión del Certificado de Cumplimiento de la OR italiana RINA, reveló que solo podía transportar carbón y briquetas de carbón color marrón.
En la denuncia del abogado Navarro Gutiérrez también se advierte que el dueño de la carga peligrosa había presentado una acción de secuestro contra el MV Ophelia, por lo que una vez en suelo panameño, la embarcación fue detenida, permaneciendo tres meses con la carga peligrosa en puerto nacional.
Uno de los pedidos que se establecen en la denuncia es que tanto Rafael Cigarruista, jefe de Marina Mercante de la AMP, y el inspector Pablo Martínez, rindan declaración y expliquen cómo el buque pudo pasar el Canal de Panamá sin haber sido inertizado.
Cabe destacar que se han emitido reportes internacionales relacionados con el transporte de la carga explosiva en Islas Marshall, Santa Marta y otros puntos, siendo la misma embarcación ubicada como la que transportaba el peligroso cargamento.