A partir de la fecha, el ex presidente de la República, Juan Carlos Varela, su esposa e hijos no contarán con la visa para ingresar a los Estados Unidos.
La decisión fue anunciada en la tarde de este jueves por el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, en un comunicado.
Según Blinken, la designación de Varela y sus familiares más cercanos de no ser elegibles para mantener la visa norteamericana representa «otra acción significativa» del gobierno del presidente Joe Biden y «demuestra que estamos comprometidos con la democracia, la defensa del Estado de Derecho y el fortalecimiento de las instituciones vitales» panameñas.
El Secretario de Estado estadounidense recalcó que el ex presidente Varela «está invocrado en importantes actos de corrupción», agregando que «mientras servía como Vicepresidente y Presidente de la República, Varela aceptó sobornos a cambio de adjudicación indebida de contratos gubernamentales».
De acuerdo con el alto funcionario del gobierno norteamericano, «si no se aborda, la corrupción seguirá deprimiendo la prosperidad de Panamá, debilitando su democracia y evitando que desarrolle todo su potencial».
Hubo inmediatas reacciones ante esta decisión. El procurador general de la Nación, Javier Caraballo, destacó que «cada país es soberano respecto a quién acepta o no dentro de su territorio, a quién le emite una visa. Estados Unidos no escapa a eso y ha decidido privar de este beneficio al ciudadano Juan Carlos Varela».
Por su parte, el presidente del partido Panameñista, José Blandón Figueroa, al que pertenece el ex mandatario Varela, señaló que éste debe pronunciarse sobre lo sucedido, «ante una declaratoria que no solo afecta su imagen, sino la de todo el país».
A su vez, el abogado internacionalista, Francisco Carreira, precisó que la designación del expresidente Juan Carlos Varela como «inelegible» para ingresar a Estados Unidos por corrupción significativa, es similar a la designación del expresidente Ricardo Martinelli realizada el pasado mes de enero.
Agregó que este año dos ex presidentes panameños, de períodos de mandato consecutivo y que además fueron una fórmula presidencial en las elecciones de 2009, «algo que debe preocupar a todos, principalmente, a la clase política del país».
