La subdirectora del Servicio Nacional de Migración (SNM), María Isabel Saravia, señaló que Panamá no está brindando o patrocinando vuelos humanitarios para los migrantes irregulares venezolanos que se encuentran en el refugio temporal ubicado en el sector de Viejo Veranillo, de la ciudad capital.
Saravia insistió en que nuestro país no cuenta con recursos económicos para pagar pasajes aéreos o contratar vuelos humanitarios, y que aquellos migrantes irregulares que se encuentran en el refugio temporal deben comprar sus pasajes aéreos, y el SNM se encarga de llevarlos al aeropuerto Internacional de Tocumen, para que hagan el viaje de vuelta a Venezuela.
«No contamos con esos recursos. Ellos quieren irse de Panamá, y están haciendo lo posible a través de sus familiares en Venezuela, para que les envíen dinero y así poder costear el pasaje. En en refugio, líneas aéreas del país sudamericano llegan a vender los boletos para que puedan viajar», apuntó la funcionaria.
Por su parte, una fuente de la embajada de Venezuela en Panamá señaló, al igual que la subdirectora de Migración, que no se están dando vuelos humanitarios, y que los migrantes tienen que comprar su boleto aéreo.
«Lo que podría suceder, y ya ocurrió el viernes, es que se dé una donación de pasajes para que se pueda hacer un vuelo. Pero hay que costear el boleto», apuntó la fuente.
Precisamente el viernes último, la Iglesia Adventista del Séptimo Día pagó los pasajes de 456 migrantes alojados en el refugio, que pudieron retornar a Venezuela; además, otras organizaciones e incluso, venezolanos residentes en Panamá, están programando una donación de pasajes para que los migrantes puedan retornar a su país.
Entretanto, este sábado 5 de noviembre fueron contabilizados unos 525 migrantes irregulares, entre venezolanos, ecuatorianos y colombianos, alojados en el refugio temporal que está financiando la embajada venezolana en nuestro país.
Las unidades del Servicio Nacional de Migración continúan brindando apoyo y atención a estas personas, a fin de que se mantengan de la mejor manera posible en el refugio temporal, mientras les llega la oportunidad de viajar hacia sus países.