El Dortmund perdió 3-2 en casa ante el conjunto bávaro y con un penal polémico, un resultado que permitió al Bayern incrementar su ventaja al frente de la tabla a cuatro puntos.
«Pueden mirar muchas de las decisiones (arbitrales) en el partido… ¿qué se puede esperar si das el partido más grande en Alemania a un árbitro que ya amañó partidos en el pasado?», lanzó después del partido el delantero inglés a la cadena noruega Viaplay.
Jude Bellingham se refería al hecho de que el árbitro del choque, Felix Zwayer, se vio implicado en 2005, cuando tenía 23 años, en el mayor escándalo de partidos amañados que haya sacudido al fútbol alemán: el caso Robert Hoyzer.
Este último, árbitro en aquel entonces, reconoció haber influido deliberadamente en resultados de varios partidos de la Copa de Alemania, a cambio de dinero procedente de una mafia croata activa en apuestas deportivas.
BELLINGHAM: – You give a referee that has match fixed before, the biggest game in Germany, what do you expect?
(@JanAageFjortoft) pic.twitter.com/H5yU9hz6PT
— Viaplay Fotball (@ViaplayFotball) December 4, 2021
Robert Hoyzer fue condenado en la época a una pena de prisión, mientras que Felix Zwayer, quien en la época ejercía como árbitro asistente a su lado, había sido sancionado con una suspensión de seis meses por el tribunal deportivo de la Federación Alemana de Fútbol.
Fue acusado de haber sido conocedor de los hechos de Hoyzer pero de no haberlos denunciado inmediatamente, e incluso de haber recibido una pequeña cantidad de dinero (300 euros), aunque no se demostró una participación activa por su parte en el amaño de partidos.
Posibles sanciones
A pesar de ese pasado, las declaraciones de Bellingham podrían llevar a la federación a sancionarle por unas palabras que podría considerar difamatorias o injuriosas.
«Tiene 18 años y habló después de un partido muy caliente y lleno de emociones, vamos a apoyarle», declaró a la agencia de prensa alemana SID, filial de la AFP, el director deportivo del Borussia Dortmund Michael Zorc.
La Federación Alemana, por su parte, declaró a la SID que estudiará las palabras de Bellingham para ver si eran susceptibles de dar lugar a «sanciones deportivas». Pero según el tabloide Bild, un observador oficial de la federación denunció por difamación a Bellingham.
«Lo que dijo no es falso, aunque no debió haberlo dicho. Hay que entender eso en un joven de 18 años. Jude no insultó a nadie, él enunció unos hechos. No puedo imaginar que haya sanciones por eso», insistió para la revista Kicker el director general del Dortmund Hans-Joachim Watzke.
Desde el Bayern, el director general y antiguo arquero de la ‘Mannschaft’ Oliver Kahn lamentó unas palabras que fueron «un poco demasiado lejos». «No tengo recuerdos de un jugador que haya hecho un comentario parecido anteriormente», aseguró Kahn.