¿Qué significado tiene el Bicentenario y por qué se celebra?, tal vez es la pregunta más realizada durante los últimos meses en Panamá, puesto que se realizó una gran campaña que hoy llega a su punto máximo.
Hoy, Panamá cumple 200 años desde que el 28 de noviembre de 1821, decidió salir del yugo al que lo tenía sometido España y decide unirse voluntariamente a Colombia, de quién se separó el 3 de noviembre de 1903, declarándose un país totalmente independiente.
Historia
Desde sus inicios, Panamá fue un territorio en donde se manejaba mucho comercio, por lo que fue fiel a la corona española, por tener un movimiento comercial muy productivo en el siglo XIX.
Fidelidad que se quebró cuando los franceses invadieron España, en lo que es conocido como la invasión napoleónica, dejando para Panamá una situación muy difícil para manejar el comercio.
Fue entonces, que gracias a Francia, Panamá intenta dejar de ser una colonia española y comienza a buscar su propio rumbo como país. Fueron 321 años los que se dice que Panamá vivió bajo la sombra española.
Volverse parte del continente Suramericano no fue una opción en ese momento, pues se libraron las ideas independentistas. Según cuenta la historia, se canceló el libre comercio, generando descontento entre los comerciantes y la población, comenzó a sentir el nacionalismo.
Fue el 28 de noviembre de 1821, cuando el nacionalismo le ganó a los intereses comerciales y en un Cabildo Abierto en la Ciudad de Panamá, se proclama la «Independencia de Panamá».
Vivencias
Al ser Panamá, uno de las últimas colonias en independizarse de España, los panameños de aquella época, abrazaron el sueño de Simón Bolívar de la unidad regional pasó a ser el sueño de los istmeños.
Ya teniendo el apoyo para dejar de ser una colonia española, Panamá analiza las opciones que tiene para ser un país independiente y las cosas no resultan bien.
La falta de presupuesto, el poco armamento militar con el que se contaba y la inseguridad de ser reconquistados por España, hace que los líderes busquen un socio para salir adelante.
Inicialmente se piensa en Perú, pero debido a la admiración que se había vendido entre los panameños sobre el sueño de Bolívar, Panamá queda unido a la Gran Colombia de Simón Bolívar, por medio de voto popular.
Cuando se da la unión, al mando de Panamá queda el gobernador José de Fábrega, quien dos días después de la independencia tuvo que optar por la diplomacia para evitar una masacre de las naves españolas que llegaron a territorio que comenzaba a conocerse como colombiano, por el acuerdo de unión.
Apoyo
Desde hace 200 años, cuando Panamá tomó la decisión de no ser más una colonia explotada por España, son muchos los cambios que se han dado.
Hoy, Panamá es un país, libre, democrático, con acuerdos, recuerdos, historias y un camino que lo ha marcado a lo largo de su historia cultural.
Es un país considerado como el Dubai de las Américas, con rascacielos y una economía en progreso recuperación tras la aparición de la COVID-19, siendo todavía un país crisol de razas, en donde todos son recibidos con los brazos abiertos.
«El Panamá actual, como todo país, tiene sus problemas: financieros, de trabajo, de construcción de comunicación, lamentablemente el juega vivo de los políticos y hasta corrupción, pero es un país que ha sabido salir adelante gracias a la idiosincrasia del pueblo», sostuvo la socióloga Berta Espino.
Cultura
El recorrido de Panamá por tantas situaciones durante su historia, ha logrado que los panameños se sientan identificados en muchas partes del mundo.
Desde la comida caribeña, la cual es una herencia de los colombianos y jamaicanos que estuvieron en la construcción del Canal, hasta el físico de los residentes de la Península de Azuero que asemeja mucho a los españoles, Panamá demuestra que 200 años después solo absorbió lo bueno de ser una colonia española y aprendió de los errores.
Siendo Panamá un país soberano e independiente, ha marcado 48 presidentes de la República, entre ellos, solo una mujer, Mireya Moscoso (1999-2004) y cuatro jefes militares.
