Estas críticas realizadas el pasado martes por la delantera estadounidense se producen debido al informe de The Athletic de la semana pasada en el cual se habla sobre la presunta conducta sexual inapropiada del exentrenador, Paul Riley.
La jugadora del Orlando Pride, comentó este martes en “Today”, programa de NBC, en el mismo también se presentaron Mana Shim y Sinead Farrelly, exdirigidas por Riley y justificaron las acusaciones en su contra, incluida la coacción sexual.
«Estoy aquí para apoyar a Mana y Sinead y continuar amplificando sus voces, y mostrar la falla sistémica de la liga y lo mal que hicieron al manejar el caso, la queja y la investigación de Mana y donde fallaron a Mana y Sinead, y probablemente a muchas otras mujeres», dijo Morgan.
«Cuando miro hacia atrás, traté de ser la mejor amiga y compañera de equipo posible para Mana, ayudándola a presentar una queja, cuando en ese momento no había una política contra el acoso, no había recursos humanos de la liga, no había línea directa anónima, no había forma de denunciar», resaltó la campeona del mundo con Estados Unidos.
«Ahora hemos comenzado a poner estas cosas en su lugar, por demanda de las jugadoras, no porque la liga sea proactiva. Algo que pedimos es que la liga comience a ser proactiva. Estamos pidiendo transparencia», agregó.
Farrelly jugó para Riley en tres conjuntos diferentes y acusó al entrenador inglés de «coerción sexual» en su etapa por el Philadelphia Independence.
Tras ser despedido por el Portland Thorns, Riley se convirtió en el entrenador del North Carolina Courage, sin embargo, el equipo lo despidió la semana pasada.
Debido a todas las acusaciones creadas, Lisa Baird, comisionada de la NWSL, renunció a su cargo la semana pasada. También la liga había decidido posponer varios partidos de este fin de semana, no obstante, este martes se dijo que sí se jugarán.
Por otro lado se encuentra Mana Shim, quien señala que el entrenador inglés arruinó sus carreras, «Es un depredador. Me acosó sexualmente, coaccionó sexualmente a Sinead y nos quitó nuestras carreras».
Riley declaró para The Athletic negando haber actuado de manera incorrecta y resaltó las acusaciones como «completamente falsas». «Nunca he tenido relaciones sexuales ni he hecho avances sexuales con estas jugadoras», añadió.
Ahora la FIFA y US Soccer iniciarán investigaciones de manera independiente sobre el asunto.