La canciller de la República, Erika Mouynes, adelantó, que junto a las autoridades colombianas han logrado un primer acuerdo, sobre el tema de la crisis migratoria en las fronteras de ambos países.
El acuerdo consiste en reducir de “manera escalonada reducir la cantidad de migrantes que llegaban desde Colombia, ya que Panamá diariamente recibía 1,500 migrantes al día”, cifra que rebasa la capacidad del país. Mouynes, explicó que durante las reuniones se estableció “un número escalonado hacia la baja para aceptar 650 migrantes en agosto y 500 en septiembre”.
Lo anterior forma parte de los resultados de la primera reunión de alto nivel en el que participaron los ministros de Relaciones Exteriores de Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, México y Panamá, acompañados por el vicecanciller de Perú, y representantes de alto nivel de Canadá y Estados Unidos.
Durante el encuentro, la canciller panameña aseguró que “no se puede detener el fenómeno de la migración pero sí podemos garantizar que tenga un paso seguro, que sea controlado y que tengamos manera, capacidad y disposición de todos para poder atenderlos de una forma conjunta”.
Señalo que se trata de un problema regional, y que dentro de las conclusiones de la reunión, se presentaron propuestas concretas para cada uno de los temas abordados.
“La migración irregular no es un problema solamente panameño. Es un fenómeno internacional que exige atención inmediata y la cooperación de los países de la región” declaró la canciller Erika Mouynes.
55 mil migrantes en 2021
La Directora Nacional de Migración, Samira Gozaine, durante su intervención indicó que en lo que va del año han pasado 55 mil migrantes ilegales, especialmente de Haití, Cuba y extra continentales. Este número corresponde al 33% del total de migrantes que han entrado al istmo desde 2013.
Señaló que si se sigue ese ritmo se espera que este flujo de migración sea 5 veces más grande que cualquier año. “Panamá es el único país de la región, que levanta una data sobre estas personas: toma sus huellas dactilares y sus datos personales”.
Por ello, indicó que se ha hecho una propuesta para que todos los países de la región, desde los países de origen de donde salen estos migrantes a los países donde se transita, también tomen medidas biométricas para asegurar que las personas que lleguen a nuestros países no tengan antecedentes criminales.
Se solicitó a los demás países conformar un equipo para luchar contra la trata y el tráfico de personas. También considerar la posibilidad de implementar medidas legales para el otorgamiento de visas de tránsito a los migrantes que inundan nuestras fronteras.
Se estableció que todos aportemos y seamos corresponsales con medidas humanitarias para estas personas. Panamá invierte aproximadamente 20 millones de dólares en atención a los migrantes, algo que no pasa en los otros países.
Se ha convenido para la otra semana que os directores de Migración, tendrán una sesión de trabajo para poder implementar medidas específicas de cada país e ir tomando decisiones conjuntas que ayuden a mitigar la problemática.
