Un grupo de virólogos presentó este miércoles un estudio preliminar que señala que la evidencia científica respalda un origen zoonótico del SARS-CoV-2, informó el Times en su edición en inglés.
Señalaron que, en los mercados de Wuhan, en China, se vendieron animales vivos susceptibles al virus.
Entre estos civetas y mapaches, en los dos años anteriores a la pandemia.
Observaron la sorprendente similitud que tenía la aparición de la COVID-19 con otras enfermedades virales surgidas a través de derrames naturales.
Asimismo, señalaron una variedad de virus recién descubiertos en animales que están estrechamente relacionados con el que causó la nueva pandemia.
Las similitudes con cuatro virus humanos endémicos
El SARS-CoV-2 mostró similitudes con cuatro coronavirus humanos endémicos: HCoV-OC43, HCoV-HKU1, HCoV-229E y HCoV-NL63, reseñan en el estudio.
Estos virus tienen orígenes zoonóticos y las circunstancias de su aparición no están claras.
En consecuencia, el virus HCoV-HKU1, identificado por primera vez en Shenzhen, Guangdong en 2004 tiene un origen animal desconocido.
Y describieron que contiene un sitio de escisión de furina en su proteína de pico, y fue identificado originalmente en un caso de neumonía humana.
El Times consignó que, los científicos, proporcionaron más evidencia a favor de que el virus se propagó desde un animal huésped.
Joel Wertheim, virólogo de la Universidad de California en San Diego y coautor, dijo al diario que en apoyo a un origen natural, era la “extraña similitud” entre las pandemias de COVID y SARS.
Ambos virus surgieron en China a fines del otoño, manifestó.
Los primeros casos conocidos aparecieron cerca de los mercados de animales en las ciudades de Wuhan en el caso de COVID y Shenzen en el caso del SARS.