El programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de la Caja de Seguro Social (CSS) tendría fondos hasta el año 2025, alertó Ricardo Lombana, excandidato presidencial y presidente del partido en formación Movimiento Otro Camino.  Sin embargo, la exdirectora de la CSS, Marianela Morales, estimó que antes de ese año el programa que paga las jubilaciones podría quedarse sin reservas.

Morales, explicó que se proyectó que entre el año 2024 y 2025, los fondos de la Caja se agotaban para pagar las pensiones, sin embargo, la pandemia Covid-19 agudizó la situación deficitaria por lo que es probable que antes del 2025, se agoten las reservas. La exdirectora de la CSS, recordó que el expresidente Juan Carlos Varela, decidió no abordar la crisis financiera de la CSS, y criticó esa decisión.

En tanto, Lombana a través de un comunicado, expresó que tras un examen de los informes que le fueron aportados por la CSS, “los números indican que desde 2018 los resultados financieros del programa de Invalidez Vejez y Muerte (IVM) del Subsistema Exclusivo de Beneficio Definido comenzaron a ser deficitarios, reportando pérdida de 50 millones de balboas en 2018 y 250 millones en 2019. Estas cifras solo van a ir en aumento en los próximos años”.

“El informe actuarial nos presenta una situación sumamente crítica y preocupante sobre el tiempo de vida que le quedan a las reservas (o ahorros) del programa de pensiones, pues indica que le queda un máximo de cinco años antes de que el programa quiebre. Es por esto por lo que es de vital importancia comenzar ya un diálogo nacional, para debatir el problema de fondo y proponer los cambios relevantes para revivir el programa de pensiones”, dijo Lombana.

Agregó que también se ha podido concluir que muchas de las recomendaciones que se le han dado a la CSS desde hace varios años han sido simplemente ignoradas. “Desatender las reiteradas voces de alerta de expertos en la materia y no tener Estados Financieros confiables ni reportes actuariales por prácticamente una década, representan un comportamiento negligente por parte de las administraciones anteriores y de la Junta Directiva”, manifestó.

La ausencia de un proceso de seguimiento de los hallazgos detectados por la Contraloría en los estados financieros y la inactividad del comité de auditoría, son algunas deficiencias adicionales encontradas por auditorías de firmas independientes, cuyos resultados obtuvo Lombana.