La industria de la construcción en Panamá atraviesa una crisis significativa, con una caída del 35.8% en agosto de este año
En momentos en que se debate el futuro de la Caja del Seguro Social (CSS), el sector de la construcción representa una oportunidad concreta para inyectar recursos a la institución a la vez que mejora la perspectiva de empleos e inversiones, de acuerdo con el último análisis coyuntural del economista independiente Luis Morán.
La industria de la construcción en Panamá atraviesa una crisis significativa, con una caída del 35.8% en agosto de 2024 en comparación con el mismo periodo del año anterior, según datos recientes.
Esta situación, según Morán, afecta a uno de los principales motores económicos del país, generando una reducción en los ingresos fiscales, pérdidas de empleos y un incremento en el déficit habitacional, especialmente en el segmento de interés social.
Según el análisis, la construcción ha sido históricamente un pilar clave para el desarrollo económico, representando una importante fuente de empleos y estimulando múltiples sectores.
Sin embargo, Morán es de la opinión que factores como el aumento de tasas de interés, la eliminación de beneficios fiscales para viviendas de interés preferencial y la morosidad del Estado en los pagos a empresas constructoras han mermado su crecimiento, afectando tanto a las empresas como a los ciudadanos que dependen de estas oportunidades laborales y de acceso a vivienda.
Despidos y morosidad del Estado
El deterioro del sector ha llevado a despidos masivos, afectando a 17,500 empleos directos y generando una contracción en la actividad de los municipios que dependen de los impuestos provenientes de la construcción. Además, la falta de pagos del Estado a las empresas de construcción ha exacerbado la crisis, impidiendo que muchas de estas empresas mantengan operaciones y empleos activos, revela el análisis.
Aumento en el déficit habitacional y expansión de asentamientos informales
La crisis en el sector de construcción también ha tenido un impacto directo en el acceso a vivienda para miles de familias panameñas. La falta de acceso a financiamiento para viviendas de interés social puede llevar a un aumento en los asentamientos informales, donde muchas familias enfrentan condiciones inadecuadas de vivienda, con servicios limitados de agua potable, electricidad y saneamiento.
Actualmente, en el interior del país, el 70% de las solicitudes para comprar vivienda han sido rechazadas debido a la elevación del ingreso mínimo necesario para calificar, que pasó de B/.570 a B/.750. Esta situación dificulta aún más la posibilidad de que las familias accedan a una vivienda adecuada y a una oportunidad de mejorar su calidad de vida.
Para enfrentar esta crisis, Morán considera urgente la implementación de una serie de medidas que permitan reactivar el sector y aumentar el acceso a viviendas de interés social, tales como:
- Focalizar los beneficios fiscales para viviendas de interés social y de interés preferencial para que más familias puedan calificar para comprar su primera vivienda.
- Crear un fondo de estabilización para el sector con apoyo de entidades financieras para proporcionar préstamos a tasas subsidiadas a desarrolladores de proyectos de interés social.
- Agilizar los pagos del Estado a las empresas constructoras para que estas puedan mantener empleos, cumplir con proveedores y reinvertir en proyectos.
- Establecer alianzas público-privadas para construir viviendas asequibles en terrenos del Estado, lo que permitiría ampliar la oferta de vivienda formal en el país.