Esto generará un efecto en el consumo doméstico que podría reducirse en 777 millones de balboas al año
El Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), advirtió sobre las consecuencias económicas del cierre estratégicos en el país.
En un informe, el gremio empresarial califica de graves el impacto de desempleo, finanzas públicas y exportaciones. Además, recomienda con urgencia proteger las actividades productivas que sostienen la economía nacional y el desarrollo sostenible.
De acuerdo con el análisis de la Conep, la la tasa de desempleo nacional podría aumentar del 7.4% al 9.3%, por lo que afectaría directamente a miles de panameños y generando un efecto negativo en el consumo doméstico, que podría reducirse en B/. 777 millones en el próximo año.
Advierte que, este escenario amenaza con debilitar aún más la dinámica del mercado interno, impactando especialmente a las familias y a los sectores que dependen del consumo local.
En términos fiscales, el país enfrentará pérdidas anuales estimadas entre B/. 375 millones y B/. 527 millones en los próximos cinco años, dependiendo de las condiciones del mercado internacional. Este retroceso complicará los esfuerzos gubernamentales para reducir el déficit fiscal y mantener programas sociales esenciales, dejando a las finanzas públicas en una situación delicada.
La Conep también advirtió de un posible retroceso en las exportaciones, que habían alcanzado niveles históricos en 2021 con B/. 3,646 millones gracias a la inserción de Panamá en cadenas globales de valor. Con el cierre de sectores productivos clave, el país podría perder hasta B/. 16,000 millones en exportaciones acumuladas en los próximos cinco años, lo que afectaría la balanza comercial y la competitividad internacional.
Entre los sectores más impactados, se encuentra la paralización de actividades de alto impacto económico, como la minería metálica, que había generado un efecto multiplicador en la economía. Su cadena de valor abarcaba servicios especializados, transporte y comercio local, beneficiando a comunidades tanto urbanas como rurales. Sin embargo, el cese de estas actividades ha limitado la generación de empleo, reducido las exportaciones e impactado la recaudación fiscal.
“Tenemos claro que Panamá debe avanzar y buscar mecanismos que promuevan la paz y la estabilidad tanto económica como social. Necesitamos confianza y capacidad de diálogo para consensuar con todos los panameños y alcanzar los resultados que el país requiere”, dijo Temístocles Rosa, presidente del Conep.
La situación plantea la necesidad de un consenso entre los sectores público y privado para reactivar aquellas actividades estratégicas que, además de ser fuente de empleo.
El Conep indicó que el país debe aprovechar esta coyuntura para reflexionar sobre las prioridades económicas y sociales.
