Correos Nacionales, es una de esas instituciones que necesitan una transformación radical y con mucha potencialidad
Hoy con los avances tecnológicos y las comunicaciones por internet tanto por correos electrónicos como por voz y video nadie la ha prestado atención a una institución centenaria como los correos nacionales.
En una época el servicio era tan eficiente y una carta o sobre desde Asia podía estar en la respectiva estafeta postal local para ser retirada en cuatro días. Esa eficiencia se ha perdido y hasta los sobres enviados desde dentro de la ciudad de Panamá pueden llegar con tres y cuatro meses de atraso. Lo digo con propiedad pues algunos bancos siguen enviando los estados de cuentas bancarias mensuales a través del sistema de correos nacionales y llegan con meses de atraso.
Correos Nacionales es una institución vegetando sin la debida atención gubernamental. Es una de esas instituciones que necesitan una transformación radical y con mucha potencialidad. Si se logra una acuerdo público-privado podría resultar en una entidad rentable adiestrando a su personal y transformando su misión.
Para nadie es un secreto la posibilidad de ampliar los servicios de los Correos Nacionales para el negocio de paquetería. Con los B2B y B2C que hoy en día prosperan en Panamá la entregue de paquetería podría ser una excelente fuente de ingresos.
La entrega puerta a puerta o para recoger encomiendas en la estafeta más cercana sería un medio para prestar un servicio necesario a los clientes y consumidores. Una flota de carros, un personal adiestrado y un buen sistema de software lograría el propósito deseado.
La experiencia y la eficiencia debe ser el pilar de los nuevos Correos Nacionales y podría inclusive ser el mecanismo necesario para distribuir paquetes inclusive fuera de la República de Panamá. Hoy las cartas y los sobres han disminuido pero las encomiendas se han incrementado.
Si el Estado no tiene el interés de invertir y transformar los correos nacionales muy bien puede concesionar dicha actividad a una empresa privada para realizarlo con los parámetros señalados. Inclusive se pueden utilizar las farmacias, los supermercados o las gasolineras como centros de acopio y entrega. Todo en función de generar velocidad y eficiencia en el servicio. Recibir una compra por internet el valor agregado en la entrega es la posibilidad para recibirlo puerta a puerta a un costo un poco más elevado a recibirlo en el supermercado, la farmacia o la gasolinera más cercana. Esto generaría muchos empleos y dinamizaría la entrega de bienes. Todo esto sin descontar la siempre necesaria necesidad de distribuir cartas, postales y correos certificados.
¿Qué opinan? Alguien se atreve a hacerle una propuesta al Estado.