El centro vital

La conmemoración del Día de las Madres remonta su origen a mayo de 1905, cuando Anna Jarvis quiso rendirle homenaje a su madre, Ann Reeves Jarvis, quien muchos años antes de morir deseaba fervientemente que alguien dedicara un día del año a celebrar a todas las madres.

Cuando Ann murió el 9 de mayo de 1905, su hija Anna se entregó a una fuerte campaña para celebrar no sólo a su madre, sino a todas las madres. Tan loable esfuerzo se inició en el pueblo natal de las Jarvis, Grafton, en Virginia Occidental, donde tres años después se realizó la primera celebración oficial del Día de las Madres en la Iglesia Metodista Episcopal Andrews.

En 1914, Woodrow Wilson, presidente de los Estados Unidos, firmó el proyecto de ley que reconocía el Día de la Madre de Jarvis como una fiesta nacional.

México, Colombia, España, El Salvador, Guatemala, Chile, Uruguay, Perú, Venezuela, Paraguay y Bolivia, entre muchos otros países, celebran a las madres, también, en el mes de mayo. Aunque la ONU proclamó, mediante resolución del 17 de septiembre de 2012, el 1 de junio como Día Mundial de las Madres y Padres.

En Panamá, a inicios de 1924 en una reunión del Club Rotario, se buscaba establecer una fecha oficial para rendir honor a las madres del país. De aquella reunión surgió el 11 de mayo como día de la conmemoración, lo cual fue aprobado por el presidente Belisario Porras.

En 1930, sin embargo, un grupo de mujeres católicas escribió a Hercilia de Arosemena, esposa del presidente Florencio Harmodio Arosemena, para solicitar que la festividad se cambiara del 11 de mayo al 8 de diciembre, día de la Inmaculada Concepción.

Dicha petición fue enviada a la Asamblea Nacional de entonces donde se enfrentó al desacuerdo de algunos que se oponían a convertir el Día de la madre en una fiesta religiosa. Aníbal Ríos, diputado de aquella asamblea, acordó el traslado de fecha con la condición que no se destacara el hecho religioso en la proclamación de la ley.

Después de la Navidad, el Día de la Madre es el festejo más popular en el mundo. A pesar que este año las condiciones en que llegamos a dicha celebración no son las usuales, rendimos homenaje a la abnegación, el amor y el sacrificio que entre otras muchas virtudes caracterizan a quienes sin duda son la columna vertebral de la familia y del país: las MADRES.

 

 

 

 

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