Hoy, se escribe un nuevo capítulo, inica otra historia dentro del libro de los diálogos en Panamá. Encuentros, conversatorios, reuniones y debates, que reúnen a los diversos sectores de la sociedad y que buscan planificar estrategias para solucionar los problemas más apremiantes de la sociedad.
El encuentro de ideologías, corrientes y diversos pensares del Panamá actual tendrán este día, el inicio de ruta en el Pacto Bicentenario ‘Cerrando brechas’, promovido por el presidente de la República Laurentino Cortizo.
El Pacto del Bicentenario “Cerrando Brechas” que debió inciar el 23 de noviembre pero que fue pospuesto para hoy, es según resalta el gobierno, «una iniciativa del presidente Cortizo, con la finalidad de lograr acuerdos nacionales en materia de salud, seguridad social, educación, economía, seguridad y servicios básicos, para sentar las bases de un mejor Panamá, contando con la participación de todos los sectores productivos del país.»
«El Pacto Bicentenario Cerrando brechas involucra a los partidos políticos y diversos sectores de nuestra sociedad. Vamos a buscar soluciones», indicó el mandatario.
Sin embargo líderes políticos como José Isabel Blandón, presidente del Partido Panameñista y Ricardo Lombana del movimiento Otro camino Panamá sostienen que hay temas que deben resolverse ya, y no integrarlos en un diálogo que apenas está por iniciar.
En tanto, Saúl Méndez, secretario general del Suntracs manifestó que la historia demuestra que la mayoría de estos diálogos al final no resuelven los problemas que tanto aquejan a la población.
El Suntracs es uno de los 18 gremios que conforman la Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente (Conusi), que fue invitada por Cortizo para participar de este diálogo nacional.
El sociólogo y catedrático Enoch Adames sostiene que el pacto es un acuerdo de poder entre distintos actores, producto de una negociación política.
«Esta es la primera complejidad que hay que resolver. ¿Quiénes son los actores del pacto? ¿qué intereses representan estos diversos actores? ¿qué es lo que tienen esos actores en común, que se pueden permitir hacer concesiones y lograr un acuerdo básico? ¿Cuál es el escenario de la realización de lo pactado?», agrega
En segundo lugar sostiene Adames, los actores del pacto deben representar distintos sectores sociales y económicos (el mundo del trabajo, empresarial, del campo y de la ciudad). También, deben participar sujetos cuyas identidades se construyen en ámbitos no tradicionales: ambiente, cultura, género, etnia, etc.
«Lo tercero, la estructura del debate debe estar orientada a llegar acuerdos que descansen en propuestas de desarrollo, fundamentadas a partir de una concepción integral de Estado y Sociedad. Por supuesto, ampliación de Derechos, ampliación de la participación ciudadana y una nueva institucionalidad acorde a la realización de estos.», añadió.
Por último, puntualiza Adames, la Constituyente es el espacio para hacer converger propuestas ya pactadas. Debe quedar claro, que los partidos políticos –entidades tradicionales—tal cual los conocemos actualmente, no formaran parte de la Constituyente.
El Pacto en cuanto producto de un gran diálogo será vinculante moral y éticamente, dado el contenido político de fundar un nuevo país. La Constituyente es la clave para fundar una Nueva República. El Pacto del Bicentenario es el medio.