La historia de Ali Dia podría ser conocida como una de las historias más sorprendentes del fútbol profesional a nivel global. Además de ser muy extraña, resulta ser interesante. Por eso en las redes muchos comentan está curiosa anécdota
Todo inició una tarde de noviembre del año de 1996 cuando el ex futbolista y entrenador del Southampton de esa época, Graeme Souness, recibió una llamada telefónica que era supuestamente de George Weah, el mejor futbolista de ese año y el único futbolista africano en ganar el balón de oro. (Actualmente es el Presidente de Liberia.) En la llamada, la persona que se hizo pasar por Weah, le recomendó a Souness que contratará a su primo, Ali Dia. como jugador para su equipo. Para aquel entonces, el Southampton, un equipo profesional de la primera división de la liga inglesa, estaba pasando por un mal momento, luchaba contra el descenso y tenía varios jugadores enfermos y lesionados. También el supuesto Weah le dijo al entrenador que Ali Dia venía de jugar unos partidos con el Paris Saint Germaine, uno de los mejores equipos del fútbol francés, y con la selección de Senegal por lo cual, debido a la situación del club, el entrenador sin verificar la información recibida no dudo en ficharlo a prueba.
Pocos días después de la llamada, el flamante Ali Dia (31 años) llegaría a la cancha de entrenamientos del Southampton. Demostró una pizca de talento, rapidez y fuerza. Al día siguiente, el Southampton se enfrentaba en un partido importante ante el Leeds United (equipo histórico inglés que recientemente ascendió de vuelta a la máxima categoría del fútbol inglés y que ahora está dirigido por el gran técnico argentino Marcelo Bielsa).
Llegó el día del partido y para sorpresa de todos y ante la escasez de jugadores, Graeme Souness convocó a Ali Dia para el compromiso, sin tener mucho entrenamiento con los otros jugadores del equipo. Este al inició del partido estaba en el banquillo de suplentes. En el minuto 23 de la primera parte, la estrella del Southampton, Matt Le Tissier, tuvo que salir lesionado e inesperadamente ingresó el nuevo jugador Ali Dia con la camiseta número 33 en su histórico debut en la Premier League.
Con solo tener segundos en el campo, tuvo una ocasión clara de gol, pero el portero del Leeds atajó el balón. Pasado este momento, para sorpresa del entrenador y de todo el equipo, Dia jugaba muy mal, demostraba una calidad de juego muy pobre y era pésimo en la parte técnica. Se notaba que no estaba al nivel profesional de sus compañeros y rivales. Debido a este lamentable desempeño jugó hasta poco más del inicio de la segunda mitad y prontamente fue sustituido. Poco tiempo después de finalizar el encuentro, con la derrota del Southampton, el entrenador llamó a Weah para reclamarle por su recomendado y para su sorpresa descubrió que Weah nunca le había realizado una llamada, que todo había sido un engaño y que incluso nunca Ali Dia había jugado en la selección de Senegal. Investigaron quien era realmente el impostor que se había colado como jugador en un equipo de la liga Premier y descubrieron que Ali Dia era un jugador amateur que había jugado sin mucha suerte en equipos de Francia, Alemania, Finlandia e Inglaterra y que aparentemente un compañero de la Universidad donde estudiaba en Inglaterra había realizado la llamada que logró que Ali Dia jugara por unos minutos en la Liga Premier inglesa. Este engaño y la audacia de Ali Dia provocó que ganara fama de timador y varios diarios ingleses lo catalogaron como el peor jugador de la historia de la liga. Ali Dia después de su histórico partido se declaró lesionado y no concurrió más a las prácticas del Southampton, sin embargo, siguió jugando unos años más en equipos amateur en Inglaterra. Después se supo que Ali Dia terminó su carrera de administración en la universidad y después hasta llegó a obtener una maestría. Además, se ha informado que trabajaba en una empresa de representaciones de futbolistas.
Para algunos, Ali Dia lo que quería era cumplir su sueño de jugar solo un partido en la liga premier. Sin embargo, considero que su audacia no estuvo acompañada ni de la preparación ni del talento futbolístico necesario. El tal vez en su fuero interno se sobre valoraba y pensaba erróneamente que haría un buen papel y subsanaría con esto su engaño, pero aprendió la importante lección que nos señala que para llegar lejos en el futbol hay que nacer con la habilidad o predisposición para ese deporte; tienes que esforzarte mucho, debes practicar constantemente, ser disciplinado y no puedes engañarte tú, ni mucho menos engañar a los demás.
Recientemente se publicó que el único hijo de Ali Diá llamado Simón, actualmente está jugando futbol Ojalá llegue sin engaños a la liga premier y no lo traten como a su padre quien debe tener mucha vergüenza., no solo por la mofa que hacen de él en los distintos medios sino por haber sido clasificado como el peor jugador en la historia de la liga inglesa.
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